Opinión

Riqueza del Museo Municipal de Ponteareas

El Paleolítico sabemos que es el período más antiguo de la historia de la Humanidad, el cual cronológicamente se sitúa desde el momento de la aparición del hombre hasta hace algo menos de 10.000 años. El hombre paleolítico se caracteriza por su ‘nomadismo’, porque precisaba cierta movilidad a fin de alimentarse. Para conocer el pasado remoto de los seres humanos en nuestra Galicia, sólo contamos con ‘artefactos’ fabricados por la mano humana y restos de edificaciones. Existen distintos tipos de asentamientos paleolíticos en la Tierra Gallega; ahora bien, el de los asentamientos de las Gándaras de Budiño –en la cercana localidad de O Porriño– es uno de los más sobresalientes.

Riqueza del Museo Municipal de Ponteareas

En las tierras de Ponteareas el hombre paleolítico vivió en las ‘terrazas fluviales’ del río Tea. ¿Muestras? Los numerosos materiales que fueron hallados en lugares como A Freixa, A Moscadeira o Pedra de Auga. Perteneciente a este período prehistórico en el Museo Municipal de Ponteareas –‘concello’ de la provincia de Pontevedra–, se conserva un conjunto de elementos tales como ‘bifaces’, ‘cantos tallados’ o ‘raspadores’. Si ahora consideramos el período Neolítico o Calcolítico, recordaremos que se fundamenta en la aparición de la agricultura y la ganadería. Comienza a fabricarse cerámica: nacen así piedras de molino. Nuevos ritos funerarios que cristalizarán en los sepulcros denominados ‘mámoas’. Aparece la técnica del pulimentado. He ahí el ‘machado pulido’ del Barral, así como el puñal de la parroquia de Angoares. Durante el Calcolítico da comienzo la metalurgia. En el Museo admiramos los fragmentos de un recipiente cerámico con decoración impresa, procedente del lugar de Picoto, límite de Covelo y Mondariz.

¿Y qué son los ‘petroglifos’? Grabados realizados en la roca, por lo que es sinónimo de ‘arte rupestre’. El núcleo central de estos grabados gallegos se localiza en el valle medio del río Lérez, en Pontevedra. Si bien está presente en toda Galicia, es propio del área atlántica, sobre todo de la zona de las Rías Baixas. Digamos que existen dos estilos: uno, geométrico y abstracto; el otro, figurativo o naturalista. Este último es el que mejor caracteriza los grabados galaicos respecto de otros focos rupestres europeos. No obstante, la mayoría de los grabados rupestres de la comarca de Ponteareas pertenecen al estilo ‘geométrico’ y poseen los siguientes caracteres principales: gran abundancia de círculos concéntricos, sobre todo de tres anillos. No hay espirales. Y todos estos grabados están ubicados en zonas altas, en peñas bien soleadas o con buena panorámica. Henos delante de un ‘petroglifo’ procedente de Chan de Gándara, en el ‘concello’ de Mondariz.

Alrededor del año 1.800 a. C. comienza a desarrollarse en Galicia la metalurgia, propia de la Edad del Bronce. En el ‘concello’ de Salvaterra de Miño apareció, en su río, una espada de ‘lengua de carpa’, conservada en el Museo Provincial de Pontevedra. Contemplamos ahora –en el Museo Municipal de Ponteareas– el ‘machado’ de bronce de tope y dos anillos, del lugar de O Piñeiro, en Covelo, y el molde de fundición del Monte das Carballas, en la parroquia ponteareana de Guillade. La riqueza de la joyería de oro del Bronce Inicial –también del cobre– es muy considerable.