Opinión

El río Mandeo y ‘Os Caneiros’ de Betanzos

“O Mandeo, que forma a ría de Betanzos, nasce nas Pías, de Arzúa, rega os concellos de Aranga, Irixoa, Coirós, Paderne e o Val das Mariñas, pasando por Betanzos, onde ten a ponte vella, amáis das estradas e do camiño de ferro que o atravesan, como ao Eume e ao Lambre, Bañobre e Xubía, na liña de Betanzos ao Ferrol. Seu curso é de 52 quilómetros e recibe varios afluentes: pola dereita os que baixan da serra da Loba e de Moncouso, ún polo concello de Aranga e outro polo de Irixoa, e pola esquerda, o da Carballeira e Vilarrasa, que forman lindeiro antre os partidos de Betanzos e Arzúa, o de Ois e o Mendo, que é o máis importante. O Mendo nasce nos montes da Tieira, e xúntase ao Mandeo perto e máis abaixo de Betanzos”, así describe el gran escritor y geógrafo –el denominado “patriarca das Letras Galegas do século XX”–, el ourensano Don Ramón Otero Pedrayo en su clásica y admirable obra Os ríos galegos, editorial Castrelos, Vigo, abril de 1977.

El río Mandeo y ‘Os Caneiros’ de Betanzos

El río Mandeo nos presenta –como escasos ríos– intereses “contrapuestos”: los de quienes desean lograr un beneficio de carácter económico con las minicentrales hidroeléctricas y los de aquellos que temen que una sobreabundante explotación impida gozar a las sucesivas generaciones de uno de los ríos más hermosos y singulares de Galicia. Contemplamos ahora el lugar de “Chelo” y su contorno dentro de un paisaje de inefable belleza. Nace el río en la fuente de Mandeo, a 700 metros de altitud, en la falda occidental del Alto dos Moscos-Campelo, sierra de Cova da Serpe.

¡“Festa dos Caneiros”, la fiesta fluvial por excelencia, un cántico estival de la Alegría! La exaltación invade anualmente el río durante los días 18 y 25 de agosto. El río Mandeo se transforma en la piedra angular de la célebre Romería. Decenas de embarcaciones –engalanadas para esta seductora celebración– navegan río arriba desde la localidad de Betanzos hasta el lugar nombrado ‘Os Caneiros’. Agrupaciones de ‘betanceiros’ colmados de vino y empanadas para la merienda, siempre dotados de las mejores canciones lúdicas para derrochar humor gallego a raudales. Semejante a una jornada sanamente báquica, esta cita anual está, empero, concienzudamente preparada durante las semanas previas. De lo que se trata es de disponer del uso de embarcaciones aptas para la feliz circunstancia.

El Mendo es el segundo río de Betanzos, el cual se une al Mandeo cuanto éste comienza a formar la ría que finalizará en el Golfo Ártabro. ¿Dónde están situadas las fuentes del Mendo? Se hallan en unas superficies aplanadas; su curso, asimismo, alterna –lo mismo que el Mandeo– los valles abiertos con los encajamientos, como desde Rexidoira hasta Trasanquelos. Recordemos que el Mandeo es, si hablamos con propiedad, el único río ‘salmonero’ de la provincia de A Coruña. ¿Por qué? Porque el río Ulla comparte jurisdicción con la provincia de Pontevedra.

El tramo postrero del Mandeo empieza al sobrepasar el paraje de ‘Espenuca’: un inolvidable “belvedere” sobre el “cañón” del río. En su margen derecha aún podemos detenernos ante los restos de una antigua edificación izada al pie de una fuente de aguas sulfurosas. Un añoso balneario de suplicantes rehabilitaciones. Con todo, ‘Chelo’ es uno de los parajes más visitados del río Mandeo.