EL CENSO DEL CERA EN GALICIA CRECE UN 17% CON RESPECTO A LOS ANTERIORES COMICIOS DE 2008

381.692 gallegos en el exterior están llamados a votar en las generales del 20-N

El número de gallegos inscritos en el CERA aumenta considerablemente desde la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica –a razón de 43 altas por día de promedio– y contabiliza para las elecciones generales del 20-N un total de 381.692 censados; un 17% más que en las generales de 2008.
381.692 gallegos en el exterior están llamados a votar en las generales del 20-N

El número de gallegos inscritos en el CERA aumenta considerablemente desde la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica –a razón de 43 altas por día de promedio– y contabiliza para las elecciones generales del 20-N un total de 381.692 censados; un 17% más que en las generales de 2008. Aún así, y teniendo en cuenta la imposición del voto rogado –incluida en la reforma de la Loreg–, la participación podría resentirse como ya ocurrió en las autonómicas celebradas en España el pasado mes de mayo, en las que se redujo al 3,56%, debido a que se obliga a los residentes en el exterior a solicitar previamente el voto.

 

Los ciudadanos gallegos en el exterior se estrenan en el voto rogado en las elecciones generales del 20 de noviembre –los de las comunidades no históricas, excepto en Andalucía, ya lo hicieron en las autonómicas del pasado 22 de mayo– y esta imposición parece jugar en contra de la participación electoral de los emigrantes, que se prevé escasa. Así lo auguró en el pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE), celebrado el pasado mes de septiembre en Madrid, el presidente de dicho organismo, Francisco Ruiz, quien pronosticó que la participación exterior en las próximas generales será un “desastre”, teniendo en cuenta la complejidad del sistema impuesto para asegurar la limpieza del voto exterior.
El voto rogado contempla una serie de pasos que incomodan a los potenciales votantes, al tiempo que le ocasionan un gasto adicional, de ahí la baja participación en las autonómicas del 22-M, en las que se puso en práctica el nuevo modelo, que, entre otras cuestiones, exige la identificación del votante para evitar el rumor de posible fraude electoral que se acrecentaba cada vez que se abrían las sacas con los votos procedentes el exterior.
No obstante, el nivel de participación alcanzado en la última convocatoria no parece razonable en un sistema democrático, por lo que el Gobierno se ve en la “obligación de mejorar ostensiblemente ese nivel”, dijo en el último pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, quien aprovechó el acto para anunciar que gestionar el voto desde el extranjero sería gratuito para las generales.
Esa medida, junto con el anuncio de una potente campaña informativa institucional dirigida a los residentes en el exterior sobre el proceso y los plazos para votar, son las únicas iniciativas que se plantea el Ejecutivo para hacer frente a un proceso que se presenta incómodo para el ciudadano, aunque desde la clase política se asegure que, con los medios actuales, es el único que garantiza la limpieza y transparencia del voto emigrante.
Galicia podría estar entre las comunidades más afectadas si se reduce de modo drástico la participación de los residentes en el exterior, puesto que el 14% de su electorado está inscrito en el CERA, frente al 4% que se contabiliza en el conjunto del Estado.
En las pasadas elecciones generales (2008), sobre un censo de 327.827 gallegos inscritos en el CERA, se contabilizaron 113.397 votos llegados del exterior, lo que indica un nivel de participación en la comunidad autónoma del 34,8%. Las provincias españolas que registraron mayor número de sufragios del exterior en dicha convocatoria fueron A Coruña (41.484), Madrid (39.587) y Pontevedra, que contabilizó 32.618 votos procedentes de la diáspora.
Con un censo total en Galicia de 381.692 inscritos en el CERA,  (132.826, en A Coruña; 110.226, en Pontevedra; 85.408, en Ourense; y 53.232, en Lugo) está todavía por ver el índice de participación que las generales del 20-N dejará en las cuatro provincias gallegas que, en la cita anterior, fue del 35,9% en A Coruña; 38,3%, en Lugo; 32,0%, en Ourense, y 33,9%, en Pontevedra.
Argentina es el país que alberga a mayor número de gallegos inscritos en el CERA: un total de 135.741, que proceden en su mayoría de A Coruña y Pontevedra, con 46.740 y 38.701 electores, respectivamente. Mientras, 25.951 son originarios de Lugo y 24.349, de Ourense.
En el caso de A Coruña, le sigue, entre los de mayor número  Uruguay (17.420), Suiza (14.242), Venezuela (11.785), Brasil (7.958), Reino Unido (6.747), Cuba (6.584) y Estados Unidos, con 5.987. Francia, con 3.584; Alemania, con 3.030; y México, con 1.122, también contabilizan un número considerable de ciudadanos de origen coruñés.
Por lo que respecta a Lugo, tras Argentina se sitúan Cuba (8.697), Venezuela (3.646), Suiza (2.708), Uruguay (2.525) y Francia (2.260), además de Brasil (1.593), Reino Unido (1.069) y Estados Unidos, con 1.034 compatriotas.
En el caso de Ourense, Venezuela, con 11.219 regitrados en el CERA procedentes de esa provincia, se coloca en segunda posición, seguido de Brasil (8.184), Suiza (7.460), Cuba (7.351), Francia (5.220), Alemania (4.684) y Uruguay, con 2.770. Mientras, EE UU contabiliza 1.979; Panamá, 1.474; y Chile, 1.142.
Por último, Pontevedra suma a los más de 38.000 en Argentina, 16.965 en Brasil, 11.024 en Uruguay, 9.936 en Venezuela, 5.362 en Suiza, 4.734 en Francia y 4.663 en Alemania. A distancia le siguen EE UU, con 2.549; México, 2.472; Reino Unido, 2.088, y Cuba, con 1.914.