La primera se fundó en La Habana en 1904 bajo el nombre de Alianza Aresana de Instrucción

El especial ‘Historias de ida e volta’ documenta la labor de las asociaciones microterritoriales gallegas creadas en Cuba

El especial 'Historias de ida e volta', un proyecto web realizado por el Consello da Cultura Galega (CCG) en colaboración con la Secretaría Xeral de Emigración, llega a marzo documentando la labor de las asociaciones microterritoriales gallegas creadas en Cuba.

El especial ‘Historias de ida e volta’ documenta la labor de las asociaciones microterritoriales gallegas creadas en Cuba
CCG-Sociedad de Lalin 1910
Miembros de la Sociedad de Instrucción, Beneficencia y Recreo Hijos del Partido de Lalín, 1910.

El movimiento asociativo de aquellos gallegos que habían emigrado al otro lado mar brotó en las primeras décadas del siglo XX. Fue en ese momento cuando en países como Argentina o Cuba se empezaron a establecer numerosas sociedades microterritoriales con las que los emigrantes buscaban fomentar el progreso y mejorar las condiciones de vida en sus localidades natales. El nuevo especial de ‘Historias de ida e volta’, proyecto del Arquivo da Emigración Galega (AEG) del Consello da Cultura Galega (CCG) que cuenta con el apoyo de la Secretaría Xeral de Emigración, muestra en 20 imágenes y documentos algunos de los hitos alcanzados por estas sociedades de emigrantes gallegos en Cuba.

La solidaridad y la empatía de los emigrantes gallegos frente a las adversidades que encontraban sus compatriotas en los países de acogida fomentaron la puesta en marcha de asociaciones étnicas de diversa tipología. Además de la fundación de centros asistenciales y benéficos, a partir del último tercio del siglo XIX los grupos de vecinos asentados en la otra orilla del Atlántico solicitaron el apoyo económico a través de la prensa de la colectividad para contribuir al desarrollo de sus localidades de origen. “Se fomentaba así la unión de la emigración originaria de un determinado lugar, parroquia, municipio o comarca para enviar remesas con las que cubrir necesidades puntuales o mejorar algunos aspectos de la vida cotidiana de sus paisanos”, subraya la nueva entrega de ‘Historias de ida e volta’.

La primera sociedad de ámbito local constituida como tal se fundó en La Habana en 1904 bajo el nombre de Alianza Aresana de Instrucción y, a partir de su ejemplo, empezó a crearse una densa red de asociaciones microterritoriales que tenían como objetivo “fomentar el progreso del terruño”, afirma el especial. “Para eso se dedicaron a construir y mantener centros de enseñanza, promover mejoras en la atención sanitaria o en las redes de comunicación y saneamiento…, sin olvidar el apoyo al agrarismo y a la lucha anticaciquil”, continúa.

Precisamente, la creación de una escuela de instrucción elemental en la villa de Ares fue uno de los propósitos de Alianza Aresana de Instrucción. El balance semestral de la junta directiva, en el que se proporcionan algunos detalles relativos a la creación del centro escolar, forma parte de los documentos que se incluyen en la entrega ‘As asociacións microterritoriais da emigración galega en Cuba’. Asimismo, la creación y mantenimiento de centros de enseñanza fue también una prioridad para otras sociedades étnicas, como la Sociedad de Instrucción Unión Barcalesa; la sociedad Pila Ancha, renombrada en 1929 como Sociedad de Instrucción y Beneficencia Hijos del Ayuntamiento de Cerdido, o la Sociedad de Instrucción Progreso de Coles. El especial incorpora diferentes fotografías que muestran los miembros de las directivas o de los socios vinculados a estas agrupaciones. Por su parte, la Sociedad de Instrucción, Protección y Recreo Unión Trivesa financió, a petición del vecindario de la parroquia, una fuente y un lavadero públicos que fueron inaugurados en 1933, tal y como se recoge en la nueva entrega de ‘Historias de ida e volta’.

La protección de los asociados que estuvieran en riesgo social ante una enfermedad o que necesitaran ser repatriados a Galicia fue también una cuestión a la que atendieron algunas sociedades. Fue el caso, por ejemplo, de la Sociedad Unión de Baleira o de Hijos del Distrito de Sarria, Sociedad de Beneficencia y Protección Mutua. Mientras, la Sociedad de Instrucción, Beneficencia y Recreo Hijos del Partido de Lalín, siguiendo los pasos de su homóloga antecesora en la Argentina, optó por ayudar no sólo a sus socios emigrados, sino también a los vecinos de la parroquia que estuvieran enfermos, para lo cual financió la construcción de un hospital-asilo en Lalín.

La recaudación de fondos necesaria para poner en marcha estas obras filantrópicas se realizaba mediante la celebración de fiestas y almuerzos que servían, además, para reforzar la interacción social entre los emigrados. En el especial se incluye el programa de la ‘Gran Jira’, un festejo organizado por el Círculo Habanero de La Devesa y en el que se recreaban las tradiciones galaicas con bailes, alimentos y bebidas típicas de Galicia. La música estaba muy presente en este tipo de celebraciones y también era el elemento definitorio de otras actividades festivas y culturales, como por ejemplo el de la rondalla que formaron los emigrantes de la comarca de Ferrol residentes en La Habana, con la que realizaron numerosas actuaciones en el seno de la colectividad gallega en la capital cubana.

La entrega número 27 de ‘Historias de ida e volta’ se complementa con otros documentos que ilustran el movimiento asociativo, como el recibo que el Centro Gallego de La Habana emitía por el cobro del alquiler de sus instalaciones o el carné que acreditaba la pertenencia a una asociación. Asimismo, también se incluyen imágenes que muestran cómo eran tanto las asambleas generales como las juntas de camaradería de los socios y socias de estas entidades.

El proyecto ‘Historias de ida e volta’

El Consello da Cultura Galega, en colaboración con la Secretaría Xeral de Emigración, mantiene el especial ‘Historias de ida e volta’ para dar a conocer aquellos materiales que documentan el fenómeno migratorio. En más de 20 entregas se documentaron los procesos de salida y llegada, la vida social y cultural, etc., para, de este modo, explicar todo el ciclo migratorio a partir de los materiales que custodia el Arquivo da Emigración Galega.