UNAS 400 PERSONAS REPRESENTANTES DE ASOCIACIONES E INSTITUCIONES ESPAÑOLAS ASISTIERON AL ENCUENTRO

Los Reyes rindieron un emotivo homenaje a los emigrantes españoles de Suiza

Los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, acompañados por la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, continuaron su segundo y último día de visita oficial en Suiza con un homenaje a los emigrantes españoles en la ciudad de Lausana. En el mismo lugar donde Barcelona fue designada en 1986 sede de los Juegos Olímpicos de 1992, el Palais de Beaulieu, el Rey don Juan Carlos pronunció un emotivo discurso que dio comienzo con un minuto de silencio en recuerdo a los fallecidos en el terremoto de Lorca (Murcia).
Los Reyes rindieron un emotivo homenaje a los emigrantes españoles de Suiza
 Los Reyes, junto a la presidenta suiza, Micheline Calmy-Rey (2d), y la directora de la Fundación del Hermitage de Lausana, Juliane Cosandier (i), visitaron una gran exposición de pintores expresionistas españoles.
Los Reyes, junto a la presidenta suiza, Micheline Calmy-Rey (2d), y la directora de la Fundación del Hermitage de Lausana, Juliane Cosandier (i), visitaron una gran exposición de pintores expresionistas españoles.

Los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, acompañados por la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, continuaron su segundo y último día de visita oficial en Suiza con un homenaje a los emigrantes españoles en la ciudad de Lausana. En el mismo lugar donde Barcelona fue designada en 1986 sede de los Juegos Olímpicos de 1992, el Palais de Beaulieu, el Rey don Juan Carlos pronunció un emotivo discurso que dio comienzo con un minuto de silencio en recuerdo a los fallecidos en el terremoto de Lorca (Murcia).

 

La llegada de los Reyes se produjo a las 12:30 horas, después de haberse reunido en Berna con un grupo de empresarios suizos. Entre los altos ejecutivos asistentes se encontraban representantes del gigante agroalimentario Nestlé, de las farmacéuticas Novartis y Roche y del banco suizo UBS. Al encuentro también asistió la presidenta suiza, Micheline Calmy-Rey. A continuación, los Reyes realizaron una visita a una gran exposición de pintores expresionistas españoles en la Fundación del Hermitage para proseguir con el encuentro con los emigrantes españoles en Suiza.
Unas 400 personas representantes de asociaciones e instituciones españolas en el país asistieron al mismo. Don Juan Carlos se dirigió a todos ellos, tanto a los que llegaron a Suiza como exiliados políticos, como a los que emigraron por razones económicas y subrayó la importancia que para él tiene la ciudad de Lausana.
“En esta hermosa ciudad de Lausana, que conocí en mi infancia, venimos a saludaros con todo afecto y a subrayar la constante aportación de la colectividad española tanto al progreso de este país amigo, como a nuestras relaciones bilaterales“.
“En efecto, los que vinisteis aquí hace medio siglo para hacer realidad vuestras ansias de libertad, o quienes emigrasteis en busca de un porvenir mejor, habéis conquistado el reconocimiento del pueblo suizo”. “Habéis conseguido esa estima con vuestro trabajo responsable y vuestra capacidad de integración, de lealtad y afecto. Con frecuencia, además, habéis creado vuestro hogar en esta tierra, contribuyendo activamente a la apertura y prosperidad de la moderna Confederación suiza”.
Los hijos de los emigrantes españoles que han nacido en Suiza pero que tienen sangre española en sus venas también fueron objeto de la atención del monarca durante su discurso. Asimismo, tampoco olvidó a la nueva oleada de emigrantes españoles que en los últimos años están llegando al país alpino buscando nuevas o mejores oportunidades laborales.
“Esos españoles que parecen suizos y esos suizos que parecen españoles, llevan en su corazón dos lealtades que son una, la historia de sus vidas, y asumen sus crecientes responsabilidades en este país”.
“Hoy nos agrada muy especialmente conocer a la nueva generación de españoles en Suiza. Los hijos de quienes vinieron antes y los jóvenes que han llegado más recientemente aseguran una cercanía todavía mayor entre ambas naciones con vistas al porvenir”.
Después de pronunciar el discurso, los monarcas, acompañados por el embajador de España en Suiza, Miguel Ángel de Frutos Gómez, tuvieron la oportunidad de saludar y conversar con los allí presentes. Los Reyes escucharon atentos los comentarios y las solicitudes de los españoles allí congregados, de diversas edades y con distintos intereses e inquietudes. Estos representantes de la colonia española estaban encantados con la amabilidad de la Reina y la atención de don Juan Carlos y no escatimaron elogios a la figura del Rey y a su papel tanto desde la transición como hasta el día de hoy.
A pesar de que no pocos emigrantes españoles han regresado a España, la colonia española en Suiza asciende a casi 100.000 personas, lo que la convierte en la quinta más numerosa en todo el mundo después de las de Argentina, Francia, Venezuela y Alemania.
En la salida del centro se habían congregado un buen número de españoles que portaban banderas de España y que querían saludar a los Reyes, a los que pidieron insistentemente que se acercaran a ellos.
Después de este acto los Reyes se dirigieron a un almuerzo con la presidenta de Suiza para finalmente tomar el avión en Ginebra con destino a España. Se daba así por concluido la visita oficial de dos días de duración de los monarcas españoles a Suiza.