La Junta modifica el reglamento de la ADE para favorecer la promoción exterior de productos y servicios

El Consejo de Gobierno ha aprobado el proyecto de decreto que modifica el Reglamento General de la Agencia de Innovación, Financiación e Internacionalización Empresarial (ADE), para favorecer la promoción exterior de productos y servicios de la Comunidad y la captación de inversiones.

La modificación del decreto que establece el reglamento general de la ADE tiene como objetivo introducir de forma expresa la internacionalización empresarial dentro de sus políticas de apoyo a las empresas de la Comunidad, además de articular la competencia para adquirir el patrimonio global de las sociedades que anteriormente estaban participadas por la agencia.

La estrategia de internacionalización desarrollada por la Consejería de Economía y Empleo en los últimos diez años ha permitido que Castilla y León tenga una economía mucho más abierta que se basa en exportar y comprar con el criterio de que la balanza comercial sea siempre positiva. Como consecuencia de esta mayor apertura económica, la Comunidad cuenta con una tasa de cobertura en el entorno de 115%, que significa que por cada 100 euros que Castilla y León compra, vende al exterior bienes por valor de 115 euros.

La modificación del reglamento responde a las necesidades de ajuste y reordenación de los distintos instrumentos públicos que dirigen su actividad al tejido empresarial con el objetivo de mejorar la eficiencia y la reducción del gasto.

El contexto general en el que se encuentra Castilla y León procede de la finalización del marco financiero plurianual de Unión Europea 2000-2006, en el que Castilla y León deja de ser ‘Región Objetivo 1’ y pasa a ser considerada por la UE como región de ‘Competitividad y Empleo’. Esto implicó la necesidad de cambiar las fórmulas de trabajo en el apoyo a las empresas. De esta forma, se desarrollaron los distintos marcos de competitividad empresarial. Además, la profunda crisis económica y financiera a nivel mundial ha llevado a modificar los escenarios presupuestarios y financieros que implica una reordenación de los instrumentos públicos de promoción económica como es el caso de la ADE.