La Agencia de Emigración apoya la interrelación entre asturianos mayores en Bruselas
La directora de la Agencia Asturiana de Emigración, Ana Rivas, recibió el pasado jueves, 12 de marzo, a la directora general de la Asociación Comisión Católica Española de Migración (ACCEM), Julia Fernández Quintanilla, para conocer de cerca los detalles de un programa que, en colaboración con el Centro Cabraliego de Bruselas, han puesto en marcha para fomentar la interrelación entre personas emigrantes asturianas que se encuentren en una especial situación de “soledad y vulnerabilidad”.
La directora de la Agencia Asturiana de Emigración, Ana Rivas, recibió el pasado jueves, 12 de marzo, a la directora general de la Asociación Comisión Católica Española de Migración (ACCEM), Julia Fernández Quintanilla, para conocer de cerca los detalles de un programa que, en colaboración con el Centro Cabraliego de Bruselas, han puesto en marcha para fomentar la interrelación entre personas emigrantes asturianas que se encuentren en una especial situación de “soledad y vulnerabilidad”.
En la reunión estuvieron también el responsable de la Asociación en Asturias, Francisco Javier Mahía Cordero, y la responsable del Área Internacional de la entidad, Reyes Castillo Fernández. ACCEM es una Asociación sin ánimo de lucro, registrada como tal en el Ministerio del Interior desde 1991, pero su trayectoria y experiencia se remonta a 1951, atendiendo a los españoles que emigraban a otros países como Alemania, Francia o Bélgica. Cuando España dejó de ser un país emisor de emigrantes y se convirtió en receptor, la Asociación Comisión Católica Española fue adaptándose a las nuevas necesidades y demandas sociales diversificando sus actuaciones.
Aunque las dificultades sociales de la emigración asturiana en Europa no es de igual magnitud ni mucho menos que la de América, las distintas asociaciones de emigrantes existentes en Bruselas habían trasladado a la Agencia Asturiana de Emigración su preocupación porque habían detectado hace tiempo la existencia de un colectivo bastante amplio de personas mayores, con pensiones bastante bajas y, sobre todo, sin estructura familiar a su alrededor que se encuentran especialmente solas en Bruselas. El proyecto que desarrollará ACCEM en Bruselas, en estrecha colaboración con el Centro Cabraliego, persigue favorecer la interrelación entre este colectivo, en el que predominan mujeres viudas de avanzada edad, y buscar espacios comunes de convivencia e intercambio.
El Centro Cabraliego es una de las asociaciones de asturianos con más solera en la capital belga. Su sede social, que cuenta con un bar en el que se distribuyen productos asturianos, se ha convertido en uno de los lugares más frecuentados por la población emigrante asturiana y especialmente atractivo para la gente joven.
En la reunión estuvieron también el responsable de la Asociación en Asturias, Francisco Javier Mahía Cordero, y la responsable del Área Internacional de la entidad, Reyes Castillo Fernández. ACCEM es una Asociación sin ánimo de lucro, registrada como tal en el Ministerio del Interior desde 1991, pero su trayectoria y experiencia se remonta a 1951, atendiendo a los españoles que emigraban a otros países como Alemania, Francia o Bélgica. Cuando España dejó de ser un país emisor de emigrantes y se convirtió en receptor, la Asociación Comisión Católica Española fue adaptándose a las nuevas necesidades y demandas sociales diversificando sus actuaciones.
Aunque las dificultades sociales de la emigración asturiana en Europa no es de igual magnitud ni mucho menos que la de América, las distintas asociaciones de emigrantes existentes en Bruselas habían trasladado a la Agencia Asturiana de Emigración su preocupación porque habían detectado hace tiempo la existencia de un colectivo bastante amplio de personas mayores, con pensiones bastante bajas y, sobre todo, sin estructura familiar a su alrededor que se encuentran especialmente solas en Bruselas. El proyecto que desarrollará ACCEM en Bruselas, en estrecha colaboración con el Centro Cabraliego, persigue favorecer la interrelación entre este colectivo, en el que predominan mujeres viudas de avanzada edad, y buscar espacios comunes de convivencia e intercambio.
El Centro Cabraliego es una de las asociaciones de asturianos con más solera en la capital belga. Su sede social, que cuenta con un bar en el que se distribuyen productos asturianos, se ha convertido en uno de los lugares más frecuentados por la población emigrante asturiana y especialmente atractivo para la gente joven.
