Opinión

42.000 euros por minuto

…Pero no para la carrera espacial o para la investigación sobre el cáncer y mucho menos para ayudas sociales. 42.000 euros pagaron los españoles, con sus impuestos, para ver en la televisión estatal a la selección española según la última auditoria interna de Radio Televisión Española (RTVE).

42.000 euros por minuto

…Pero no para la carrera espacial o para la investigación sobre el cáncer y mucho menos para ayudas sociales. 42.000 euros pagaron los españoles, con sus impuestos, para ver en la televisión estatal a la selección española según la última auditoria interna de Radio Televisión Española (RTVE).
Esto es así y así hay que aceptarlo, somos un país de primera, de ‘Champions…’ vamos, lo de siempre. Mientras María Dolores de Cospedal llama nazis a aquellos que protestan por perder sus casas (previa pérdida de sus trabajos) ante las viviendas de gente como ella que se chupa varios sueldos a la vez por decir bobadas y monadas, la RTVE gasta al margen de la legalidad un dinero que no es suyo para alimentar el pan y circo futbolero con el que quieren mantener la “chusma” a raya (sin trabajo, sin pensión, sin casa pero con fútbol).
Cada vez que juega la selección española vemos un pelotón de periodistas españoles (la mar de contentos) en Qatar, Polonia, California o Japón, abriendo y cerrando los informativos con frases hechas y comentarios intrascendentes sobre el estado del campo o la temperatura. Toda esa gente se montó en un avión y pasó varios días de hotel, comiendo y bebiendo. Desconozco su convenio laboral, igual cobran doble o triple por el viaje. Después metemos en la “cuenta de los 42.000” al personal contratado del lugar (intérpretes, conductores), a los camarógrafos, al personal técnico, maquilladores y los periodistas de la radio (no olvidemos la R de RTVE)… que también van en avión, comen, duermen y cobran por los escasos minutos diarios de trabajo en los que nos cuentan el frío que hace y lo motivada que está la “Roja”. Nuevos ricos a 42.000 euros por minuto. No me extraña que salgan tan contentos (y caros) con su equipación ‘Lacoste’ los periodistas deportivos de RTVE; nazis desde luego no son.