Un monumento recoge los nombres de las 456 personas que migraron desde Euskadi

El centro vasco Euzko Alkartasuna de la ciudad argentina de Macachín rindió un homenaje a la migración vasca

Frente a una multitud emocionada, la euskal etxea de Macachín rindió homenaje a vascos inmigrantes al Departamento de Atreucó, en la provincia argentina de La Pampa. La euskal etxea, ubicada a 630 kilómetros al sur de Buenos Aires, realizó el pasado fin de semana el Euskal Asteburua, entre cuyas actividades se inauguró un monumento en homenaje a las 154 mujeres y 302 hombres que llegaron al Departamento de Atreucó, entre 1860 y 1960.

El centro vasco Euzko Alkartasuna de la ciudad argentina de Macachín rindió un homenaje a la migración vasca
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Un momento del homenaje de la euskal etxea de Macachín.

Frente a una multitud emocionada, la euskal etxea de Macachín rindió homenaje a vascos inmigrantes al Departamento de Atreucó, en la provincia argentina de La Pampa. La euskal etxea, ubicada a 630 kilómetros al sur de Buenos Aires, realizó el pasado fin de semana el Euskal Asteburua, entre cuyas actividades se inauguró un monumento en homenaje a las 154 mujeres y 302 hombres que llegaron al Departamento de Atreucó, entre 1860 y 1960.

Durante el acto, se hizo un reconocimiento a una docena de inmigrantes de Euskadi presentes allí y se declaró ‘Ciudadano Ilustre de La Pampa’ al presidente del centro vasco, Iñaki Unamuno. Además, quedó inaugurado el monumento que recoge los nombres de las 456 personas que migraron desde el País Vasco. Participaron del encuentro la delegada de Euskadi en Argentina-Mercosur, Sara Pagola; la presidenta de la Federación de Entidades Vasco-Argentinas, Arantxa Anitua; y representantes de 15 euskal etxeak provenientes de distintos puntos del país.

El evento fue el cierre del Programa ‘Euskal Sustraiak-Raíces Vascas’, un trabajo de recuperación de la memoria histórica que consistió en investigar y recopilar la información sobre todas las personas que llegaron al Departamento de Atreucó provenientes de Euskal Herria, durante 100 años. Sus nombres quedaron grabados en las placas que conforman el monumento, ubicado en la plaza central de Macachín, junto al retoño del árbol de Gernika y frente a la sede de la euskal etxea. El trabajo de investigación llevó dos años y se presume que aún quedan algunas personas por encontrar. Se calcula que quienes descienden de aquellos migrantes alcanzan las 3.000 personas. Muchas de ellas se encontraron en la cena para 700 personas que brindó la euskal etxea posteriormente al acto.

El programa del Euskal Asteburua incluyó también torneos de pelota y de mus, actividades para dantzaris y taller de jautziak. Destaca el estreno del documental ‘Haritzetik Caldenera-Del Roble al Caldén’ sobre la historia de la euskal etxea. Los representantes de las euskal etxeak que se reunieron el fin de semana en Macachín llegaron desde las ciudades de La Plata, Villa María, Rosario, Buenos Aires, Mar del Plata, Necochea, Laprida, Bahía Blanca, Trenque Lauquen, Santa Rosa, General Acha, Pergamino, Río Colorado, Chacabuco y Chivilcoy. Algunas de esas personas viajaron más de 600 kilómetros para participar del homenaje.