Lecciones de promoción turística en Polonia
La promoción del turismo centró buena parte del viaje que Manuel Fraga realizó a Polonia en 1999, año en el que el país de la antigua Europa del Este pugnaba por su ingreso en la Unión Europea. La vieja ciudad polaca de Cracovia y Varsovia fueron los dos núcleos urbanos que el presidente gallego, que viajaba acompañado de una misión comercial, visitó en aquella ocasión.

La promoción del turismo centró buena parte del viaje que Manuel Fraga realizó a Polonia en 1999, año en el que el país de la antigua Europa del Este pugnaba por su ingreso en la Unión Europea. La vieja ciudad polaca de Cracovia y Varsovia fueron los dos núcleos urbanos que el presidente gallego, que viajaba acompañado de una misión comercial, visitó en aquella ocasión.
Y fue precisamente en Varsovia donde Fraga, conocedor de los entresijos del turismo –no en vano fue ministro de Información y Turismo en la época de Franco– dio lecciones sobre promoción turística en el Instituto de Estudios Ibéricos a los estudiantes que asistieron al acto. El mandatario gallego aseguró por entonces que Europa había superado el turismo de las tres eses –sun, sand y sex, o sea, sol, arena y sexo– y que lo que triunfaba en ese momento era el turismo de calidad, por el que, dijo, había apostado Galicia.
Durante el viaje, tuvo ocasión de reunirse con el presidente polaco Aleksander Kwasniewski en el mismo palacio donde hacía más de 40 años se había firmado el Pacto de Varsovia.
Y fue precisamente en Varsovia donde Fraga, conocedor de los entresijos del turismo –no en vano fue ministro de Información y Turismo en la época de Franco– dio lecciones sobre promoción turística en el Instituto de Estudios Ibéricos a los estudiantes que asistieron al acto. El mandatario gallego aseguró por entonces que Europa había superado el turismo de las tres eses –sun, sand y sex, o sea, sol, arena y sexo– y que lo que triunfaba en ese momento era el turismo de calidad, por el que, dijo, había apostado Galicia.
Durante el viaje, tuvo ocasión de reunirse con el presidente polaco Aleksander Kwasniewski en el mismo palacio donde hacía más de 40 años se había firmado el Pacto de Varsovia.