La pintora, originaria de Argentina y nacionalizada española, se radicó en Vigo

Elsa Pérez Vicente expone sus dibujos y pinturas en la Casa de Galicia en Madrid

Bajo el título de ‘Vivencias’, Elsa Pérez Vicente, artista radicada en Vigo, reúne en la exposición de dibujo y pintura que inauguró en la Delegación de la Xunta-Casa de Galicia en Madrid una colección de obras de diversas temáticas y técnicas, en la que están presentes el clasicismo, el romanticismo y el tango de su Argentina natal, donde conoció a su marido, el pintor de Vigo Antón Abreu Bastos, emigrante en Buenos Aires.

Elsa Pérez Vicente expone sus dibujos y pinturas en la Casa de Galicia en Madrid
Elsa Pérez ante una de sus obras.

Bajo el título de ‘Vivencias’, Elsa Pérez Vicente, artista radicada en Vigo, reúne en la exposición de dibujo y pintura que inauguró en la Delegación de la Xunta-Casa de Galicia en Madrid una colección de obras de diversas temáticas y técnicas, en la que están presentes el clasicismo, el romanticismo y el tango de su Argentina natal, donde conoció a su marido, el pintor de Vigo Antón Abreu Bastos, emigrante en Buenos Aires. La muestra estará abierta al público hasta el próximo día 28.

La artista fue presentada por el coordinador de Actividades Culturales de la Casa, Ramón Jiménez, quien valoró que “el dibujo, y la pintura toda de Elsa, de la que el dibujo forma parte, es de una sensibilidad tal que estimulan a la imaginación a volar en pos de mundos soñados de gran carga poética”. “La pintura, los dibujos de Elsa son sugerentes y literarios, a mí particularmente me traen a la memoria a los tigres y laberintos de Borges”, añadió, apreciando asimismo que en la muestra también hay temas gallegos, pues “no en vano Elsa se afincó en Vigo en el año 1977 con Antón, trasladando con ella sus ‘Vivencias’, ese mundo espiritual del que nacen los recuerdos y el arte”. “Tenemos aquí obras de las dos orillas, de aquí y de ‘alén do mar’, de más allá del mar, es decir de recuerdos que nacieron de las vivencias de la otra orilla del mar, con lo que se da en esta Sala un verdadero mestizaje cultural”, mantuvo Jiménez.

Elsa Pérez, que estuvo acompañada por su hija, Alejandra Abreu, explicó sobre las obras de la exposición que “los temas que desarrollo son los que determinan las técnicas”. Así, “si el tema es dramático, uso el negro del carbón o la tinta china; para una maternidad, la sanguina que es una tiza de color cálido rojizo. Para mostrar la dinámica del vuelo de un pájaro utilizo la pluma y tinta china. Para un retrato, el pastel, con toda su gama de color, también puede ser lápiz carbón o pluma y para el estudio del desnudo, el carboncillo que describe los volúmenes”.

“Siempre me ha gustado captar el movimiento, sea de una paloma, un caballo, el baile o un desnudo”, añadió sobre la temática de su obra la artista, para quien “exponer es la forma de comunicarse con el espectador, que completa el mensaje de la obra y ese es en definitiva, el destino del arte”.

“Una larga tradición plástica se resume en esta obra, fresca y como antigua. Tal que intemporal. Cuando la contemplamos, nos parece estar viéndola no directamente, sino reflejada en un espejo cuyo azogue ha cuarteado el tiempo, para que los cutis nacarados se salpiquen de opacidades ocasionales”, escribe en el prólogo del catálogo de la exposición Francisco Pablos, de la Real Academia de Bellas Artes, sobre la obra de Elsa Pérez Vicente.

Elsa Pérez Vicente nació en Buenos Aires, se tituló en la Escuela Nacional de Bellas Artes ‘Prilidiano Pueyrredón’ y fue premiada por la Academia Nacional de Bellas Artes de la Universidad de Tucumán en la asignatura de Dibujo. Se casó con el pintor de Vigo Antón Abreu Bastos, emigrante en Buenos Aires, del que la Casa acogió hace año y medio una exposición póstuma y antológica. En 1973 recorrió en viaje de estudios España, Francia, Italia, Holanda e Inglaterra.

Se radicó en Vigo en 1977 y adquirió la nacionalidad española. Ha realizado diecinueve exposiciones individuales y ha participado en colectivas en Argentina, Estados Unidos, España y Portugal. Ha hecho retratos, ilustraciones de libros y pinturas murales, cuya técnica al “fresco” aprendió con el maestro Urruchúa.