CON LAS VOCES DE GRACIELA PEREIRA Y MARUXA VILLANUEVA

El Centro Betanzos de Buenos Aires conmemoró el Día das Letras Galegas

El Centro Betanzos de Buenos Aires conmemoró con un acto entrañable y emotivo el Día das Letras Galegas, que este año, siguiendo a la Real Academia Gallega, estuvo dedicado a poner en valor la figura y trayectoria de Valentín Paz-Andrade.
El Centro Betanzos de Buenos Aires conmemoró el Día das Letras Galegas
 La primera a la izq., la presidenta del Centro, Beatriz Lagoa, entre el público, acompañada por otros directivos de la institución.
La primera a la izq., la presidenta del Centro, Beatriz Lagoa, entre el público, acompañada por otros directivos de la institución.

El Centro Betanzos de Buenos Aires conmemoró con un acto entrañable y emotivo el Día das Letras Galegas, que este año, siguiendo a la Real Academia Gallega, estuvo dedicado a poner en valor la figura y trayectoria de Valentín Paz-Andrade.
Dando comienzo al encuentro, que tuvo lugar el sábado día 19 en la sede porteña de esta asociación centenaria, su presidenta, Beatriz Lagoa, se refirió a los aspectos más sobresalientes de la vida de Paz-Andrade y recordó que la fecha conmemora la publicación –en La Habana, el 17 de mayo de 1863– del primer ejemplar de la obra ‘Cantares Gallegos’ de Rosalía de Castro, marcando el inicio del ‘Rexurdimento’ o renacimiento cultural del gallego. Ahondando en la vida de este escritor, abogado, empresario y político galleguista, señaló que fue la Editorial Galicia del Centro Gallego de Buenos Aires donde pudo publicar, en 1955, ‘Pranto Matricial’, traducido al castellano por María de Villarino y con dibujos de Colmeiro, Maside, Souto y Torres. En julio de 1957, viajó nuevamente a la Argentina para participar de los festejos del cincuentenario del Centro Gallego y para tomar parte, por segunda vez, en las Jornadas Patrióticas Gallegas organizadas por la entidad. Un año más tarde, en julio de 1958, se publicó en Buenos Aires ‘El sistema económico de la pesca en Galicia’ y, en junio de 1959, ‘Galicia como tarea’. Este libro que Paz-Andrade tituló en un primer momento ‘Galicia en números vivos’, precisó, recoge textos ampliados de las conferencias que dio el autor en Sudamérica en el año 1957, analizando la potencialidad de Galicia y los principales problemas a los que se enfrentaba en esa época.
Seguidamente, la cantante Graciela Pereira ofreció un espectáculo de música y poesía en el que puso melodía a algunos de los poemas más emblemáticos de Rosalía Castro y se escuchó la voz de la cantante y actriz gallega Maruxa Villanueva, recitando poemas de Rosalía. “La idea de grabar a Maruxa recitando unos poemas de Rosalía surgió una tarde mágica que pasé con ella en Padrón en el año 1994”, contó Pereira. De regreso en Buenos Aires, Graciela Pereira se dedicó a musicalizar algunos versos de la poetisa; mientras que, en Galicia, Maruxa escogió los poemas que más le gustaban y los grabó. “Un tiempo después, –contó Graciela Pereira– recibí de ella la generosa entrega de su voz como una prueba legítima de su entrañable cariño”.


Maruxa Villanueva
Maruxa Villanueva nació en 1906, en Barrela, Galicia. En 1926, cuando tenía 20 años emigró a la Argentina, siguiendo a dos de sus cuatro hermanos. Recién llegada a Buenos Aires comenzó a trabajar como empleada en un comercio dedicado al rubro de la confección. Algunos años más tarde, en 1934, puso acceder a algunos contratos en emisiones radiales que le permitieron consagrase como artista y abandonar su empleo de comercio para dedicarse exclusivamente a componer y cantar. Durante la guerra civil española, Maruxa colaboró con las actividades organizadas en Buenos Aires a beneficio del gobierno republicano español. En esa época también conoció al dramaturgo estradense Daniel Varela Buján, con quien se casó y más tarde conformó, junto a su marido y el actor gallego Fernando Iglesias (más conocido como Tacholas), la compañía teatral ‘Marujita Villanueva’, que entre otras obras presentó ‘Os vellos non deben namorarse’ (1941), de Alfonso Castelao.
En 1949, regresó a Galicia donde intentó desenvolverse como actriz. Aunque allí se encontró con bastantes dificultades, de la mano de amigos como Ramón Otero Pedrayo consiguió hacer algunas presentaciones teatrales que cosecharon éxitos. En 1953 retomó la actividad teatral con la creación de la compañía teatral ‘Os labregos’. Dirigida por ella, la compañía consiguió hacer algunas presentaciones, que aunque fueron de carácter filantrópico, el régimen franquista terminó censurando.
En 1958 regresó a la Argentina, donde conformó el trío vocal ‘Rosalía de Castro’ junto a las sopranos argentinas Elsa de Zoppo y Maruja Iniesta, pero en 1962 decide regresar definitivamente a Galicia donde se pone en contacto con el Patronato Rosalía de Castro. En 1972, cuando el doctor Agustín Sixto Seco es elegido presidente del Patronato le propone hacerse cargo de la atención de la Casa de Museo. Tarea a la que dedica todo su tiempo convirtiéndose en una  especialista en el tema.
El 24 de noviembre de 1998, falleció en el Hospital de Conxo de Santiago de Compostela, a los 92 años de edad.