Feijóo destaca ante los embajadores europeos la credibilidad y las oportunidades de inversión que ofrece Galicia

Feijóo destaca ante los embajadores europeos la credibilidad y las oportunidades de inversión que ofrece Galicia
Núñez Feijóo, con los embajadores que están de visita en Galicia.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se refirió a Galicia como un ejemplo de responsabilidad y buena gestión de los fondos comunitarios y destacó, ante la delegación de embajadores de la UE que forman parte de la delegación que visita la comunidad, la credibilidad y las oportunidades de inversión que ofrece esta comunidad.

Feijóo expresó, de este modo, el deseo de que esta cita histórica sirva para que Galicia siga teniendo lazos con los países representados: lazos culturales, lazos políticos y, sobre todo, lazos económicos, en un momento en el que Europa necesita luchar con más unidad si cabe contra las dificultades.

Sobre este último punto, el titular del Gobierno gallego propuso aprovechar este encuentro para ahondar en un intercambio fructífero que se traduzca en más desarrollo y más prosperidad. Y, en este sentido, resaltó que Galicia ofrece para ello una responsabilidad económica que se prolonga desde hace ya muchos años: “Somos una de las comunidades más solventes de España; la única comunidad que está cumpliendo los criterios de déficit público todos los años y la comunidad donde menos se incrementaron los intereses de la deuda pública”.

Asimismo, incidió en que Galicia ofrece también credibilidad, “la misma que permitió, por ejemplo, la renovada apuesta de Citroen por su factoría de Vigo, o el compromiso de la cuarta petrolera del mundo, Pemex, con los astilleros públicos y privados de nuestra tierra”; y oportunidades de inversión y una importante superficie de suelo industrial para que puedan desarrollar proyectos de todo tipo, “tanto en nuestros sectores más tradicionales como la automoción, el naval, el textil, la industria agroalimentaria o el forestal, como en otros ámbitos más punteros, pero por los que apostamos de forma decidida, como las energías renovables o las nuevas tecnologías”.

En el campo cultural, Feijóo destacó el potencial de la Comunidad gallega reflejado en la Praza do Obradoiro y en proyectos como la Cidade da Cultura. E insistió en su condición de puente entre realidades distintas que son complementarias: puente entre el mundo hispano y luso, que se verá reforzado con el Eje Atlántico; o puente entre Europa y América, a través de los grandes puertos de Vigo, A Coruña y Ferrol.

La voluntad de apostar por Galicia y la confianza de creer en Galicia

El responsable autonómico afirmó que Galicia ofrece todo esto y sólo pide a cambio voluntad y confianza. “La voluntad de apostar por Galicia y la confianza de creer en Galicia”, aseveró, después de abogar por seguir profundizando en una doble faceta presente en nuestro mundo empresarial, universitario y cultural: aprecio por lo propio y apertura a las influencias externas. “Inversiones foráneas que entran a formar parte de nuestra economía, junto a multinacionales gallegas que compiten en el mercado global. Esfuerzo investigador con herramientas autóctonas, y un permanente anhelo por incorporar corrientes foráneas. Una cultura que no se aísla, sino que abre puertas y ventanas”.

A lo largo de su intervención, el presidente de la Xunta recordó que la responsabilidad y el buen uso con los que Galicia gestionó los fondos comunitarios están detrás de dos decisiones recientes: que Galicia fuera elegida por el Comité de las Regiones para elaborar un dictamen de especial relevancia, acerca de cómo se deberán gastar mejor los fondos comunitarios en el próximo período 2014-2020. Y que el próximo presupuesto de la Unión recoja la aspiración de Galicia, así como de otras comunidades europeas que dejarán de ser objetivo prioritario a partir del año que viene, de que podamos beneficiarnos de un fondo de transición que nos garantice un aterrizaje suave en los próximo años.

Para Feijóo, ambas decisiones suponen un reconocimiento a la gestión que Galicia realizó de los fondos comunitarios y a la acción del Gobierno de España, y supone dar un paso más “en ese reencuentro con Europa, que trajo como consecuencia una Galicia que abandona definitivamente las épocas de su negra biografía”.

“Galicia es una muestra de que ese esfuerzo solidario que está en las entrañas del proyecto europeo, no fue estéril. Se plasma en los kilómetros de autovías que nos conectan con el resto de la Península y en los kilómetros de Alta velocidad ya construidos y los que nos quedan en construcción. Se plasma en una sociedad innovadora que modernizó su aparato productivo, hasta el punto de que su Producto Interior Bruto pasó del 75,6% a más del 90% tan sólo en 10 años. Ejemplos, en suma, que demuestran que la política de cohesión europea tiene reflejo y utilidad en esta sociedad gallega, y van a seguir teniéndolo”, añadió.

Galicia, una comunidad abierta, plural y con valores

Alberto Núñez Feijóo apeló al espíritu europeísta de Galicia como una comunidad abierta, plural y con valores. “Queremos vernos a nosotros mismos como una Europa en miniatura, con sus valores y su pluralismo. Somos un pueblo viejo y nuevo de Europa que sabe dónde está y a dónde quiere ir; sin incertidumbres ni aventuras extravagantes, y orgulloso de su españolidad y de su europeísmo”.

El presidente gallego subrayó que ahora que la Unión Europea tiene ante sí “encrucijadas vitales”, “no podemos olvidar de donde venimos” ni que “nuestra Europa, con todas sus imperfecciones, es una de las realizaciones más fecundas de la historia universal”, precisó. Feijóo señaló que “no hay precedentes de pueblos que se unan pacíficamente para formar una entidad común”. “Si ahora soñasemos con un mundo en paz, respetuoso de su pluralidad y de sus derechos, con un desarrollo equilibrado, ese mundo se parecería a la Unión Europea”, enfatizó.

El titular de la Xunta reconoció que en Galicia y en el Camino de Santiago está una de las cunas de Europa y de su espíritu, y consideró que “tan cierto como que Galicia contribuyó al parto de Europa, es que Europa hizo posible una nueva Galicia”. Una tierra, añadió, que “sale de su postración gracias al trabajo de sus habitantes, al nacimiento de la España democrática y al establecimiento de una Europa solidaria”.