Los castellanos y leoneses en Cataluña celebraron los actos centrales de las Jornadas Culturales de Fescu
La Federación de Entidades Socio Culturales de Castilla y León en Cataluña (Fescu) convocó el pasado fin de semana a socios y simpatizantes a los actos centrales de sus Jornadas Culturales, un evento que tiene como objetivo atraer a los paisanos de la región, fomentando el espíritu de pertenencia a la vez que se divulgan las tradiciones y cultura propias de su comunidad de origen.
Los actos, según informa la entidad, comenzaron a desarrollarse, el pasado sábado 17, con la intervención del presidente saliente de Fescu, Luis García Calavia, quien sumergió al público asistente en la Castilla y León de Miguel Delibes, escritor vallisoletano, amante de su tierra, quien prefirió quedarse en ella a trasladarse a Madrid para dirigir un periódico. Y eso que hasta le habían buscado un coto de caza en los alrededores de la capital para que pudiese practicar su deporte favorito, señaló García Calavia, quien, según apunta la propia entidad asociativa en su escrito, dirigió “con acierto los últimos diez años de Fescu”.
Tras su intervención, se procedió a la entrega de premios del certamen de fotografía que convoca la Acción Cultural Miguel de Cervantes (La cervantina), presidida por Marisol Riguelme, a quien, junto con su directiva, la Federación agradece el “esfuerzo” y “gran interés” mostrado en sumarse a los actos conmemorativos que ensalzan la cultura castellana y leonesa en Cataluña. Las fotografías del certamen pudieron ser contempladas por los asistentes a la cita en la exposición instalada en la antesala del auditorio en el que tuvo lugar el acto.
La celebración incluyó la entrega de premios a personalidades e instituciones volcadas con la entidad, entre los que cabe destacar el galardón concedido al personal del Servicio de Ciudadanía Castellana y Leonesa en el Exterior de la Junta de Castilla y León que, “con su dedicación y benevolencia, hace que las cosas funcionen, a pesar de la inexperiencia” de entidades como la que nos ocupa, “para entender los procedimientos de los estamentos oficiales”, señala la Federación. Recogió el galardón Jorge Herrera, jefe del Servicio Exterior de la Junta de Castilla y León.
El segundo premio fue para Luis García Calavia en señal de agradecimiento a su “dedicación” a la entidad durante los 10 años que permaneció al frente de la misma, “en una época nada fácil, agravada por la pandemia”, remarca el escrito.
El acto del sábado continuó con la actuación del grupo de danzas ‘Estepa Castellana’, llegado de la capital mundial del Piñón, Pedrajas de San Esteban, un “bonito, acogedor e industrioso pueblo de la provincia de Valladolid”, como lo califican en Fescu. Dirigidos por Arancha Herrero, el grupo escogió para la ocasión un repertorio de bailes representativos de distintas provincias castellanas y leonesas, que fue muy aplaudido por el público asistente a la jornada de apertura.
Desde la organización se destaca la aportación al evento de los componentes infantiles de la escuela de danza –“Lo hicieron muy bien”, aseguran–, una escuela que puso el “broche” a su actuación con una interpretación musical a su patrona, la Virgen de Sacedón, cantada por Alfonso González, con “gran calidad y sentimiento”.
Despidió el acto el presidente de Fescu, Juan María Santiago, quien recordó a los presentes que en Cataluña existen colectivos con más visibilidad que los castellanos y leoneses, que, en contra de lo que hacen aquellos, tienden a agruparse por provincias –lo que “nos resta visibilidad y presencia social”, aseveró–, en lugar de hacerlo agrupados y potenciando la comunidad. Para evitar permanecer en el error, Santiago invitó a los asistentes a “sacar conclusiones” al respecto y animó a los socios a aportar un socio nuevo al centro, así como a los que no pertenecen a ningún centro a que “se inscriban en alguno de su conveniencia”.
La celebración continuó, el domingo 18, con actuaciones folclóricas, que se vieron un tanto ensombrecidas por las pocas gotas que cayeron esa mañana.
La primera actuación estuvo a cargo del Círculo de Castilla y León con la declamación de varias poesías por parte de miembros de esta asociación, que dirige Conchita de Pedro. El grupo de pulso y púa de la Casa de Soria interpretó varias piezas musicales y, para finalizar, sus integrantes cantaron algunas jotas de la parte oriental de la provincia de Soria.
La tercera actuación corrió a cargo de la coral Santa Gadea, del Centro Castellano y Leonés –“nuestra coral”, remarcan–, que interpretó varias canciones tradicionales y populares y terminó con ‘La Castellana’ que, según dicen, se ha convertido, casi, “en el himno de nuestro Centro”.
Cerró el acto el grupo de danzas de Hospitalet con unos bailes muy aplaudidos por los asistentes, a pesar de la falta de algunas danzantes.
Ramón Peña, presidente de la asociación Virgen de la Arandilla, fue el encargado de realizar las presentaciones y dirigir el acto.
Seguidamente, se celebró una comida de hermandad para las personas que se habían inscrito. Muchas peticiones de última hora no se pudieron atender, aclaran, debido a la dificultad que entraña el tener que asumir a última hora un mayor número de solicitudes de las previstas.
Desde Fescu se agradece la presencia en las jornadas del jefe del Servicio Exterior de la Junta de Castilla y León, Jorge Herrera González, quien acudió en representación del director de Acción Exterior, Fernando Rubio Ballestero. “Agradecemos al señor Herrera su cercanía y talante para el diálogo, que nos ha dejado convencidos de que tenemos un canal de comunicación diáfano con la Junta de Castilla y León”, aseguran.
Al finalizar la comida, cerrando el acto, el presidente de Fescu agradeció la numerosa asistencia a los actos y recordó que “la labor a desarrollar está en la base de las entidades, porque si no hay socios, no hay entidades y, consecuentemente, no hay federaciones, ni nada más allá”, sentenció.
