El consejero por Reino Unido se reunió con el presidente de Asturias

David Casarejos: “La diáspora reclama la creación de una circunscripción exterior desde hace décadas”

El presidente de la Comisión de Derechos y Participación del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) y presidente del Consejo de Residentes Españoles (CRE) de Manchester, David Casarejos, presentará una propuesta al Pleno para que se dirija a todos los partidos políticos asturianos con representación parlamentaria, pidiendo su apoyo a la propuesta del presidente del Principado de crear una circunscripción electoral para la emigración asturiana. “El consenso en esta materia en Asturias ayudaría a que más Comunidades Autónomas incluyan la circunscripción exterior en sus planes de futuro y quizás poder llevar esta discusión al Congreso de los Diputados”, manifestó.

David Casarejos: “La diáspora reclama la creación de una circunscripción exterior desde hace décadas”
Casrejos con Adrián Barbón
David Casarejos y Adrián Barbón, durante su encuentro.

Casarejos, que esta semana se reunió con Adrián Barbón en la sede de la Presidencia, mostró su total sintonía con el propósito del jefe del Ejecutivo asturiano de que uno de los 45 diputados del parlamento autonómico sea ocupado por un representante de los asturianos en el exterior. De forma, en Asturias se pasaría de tres a cuatro circunscripciones (centro, oriente y occidente), y en la cuarta se elegiría un solo diputado, que se detraería de los 34 que se eligen en la central, sin necesidad de modificar el Estatuto de Autonomía, tan solo haciendo un ligero cambio en la Ley Electoral.

“Casi el 14% de la población asturiana reside en el exterior, y es la segunda comunidad autónoma española con mayor porcentaje de población residiendo fuera del país”, afirmó el consejero, quien recordó “el gran interés de la diáspora en la creación de la circunscripción exterior desde los comienzos del CGCEE, allá por 1990”, y la constante llegada de propuestas a la Comisión de Derechos Civiles en este sentido durante los 8 mandatos que esta institución lleva representando a los españoles del exterior.

Por su parte, Adrián Barbón, que expresó su propósito de poner en marcha planes para favorecer el retorno de emigrantes de primera, segunda y hasta tercera generación, destacó su intención de que durante esta legislatura la Dirección General de Emigración funcione de forma separada de la Dirección General de Memoria Democrática. “Este cambio resalta la importancia que la diáspora ha de tener en los próximos cuatro años” aplaudió Casarejos, para quien “Asturias muestra de esta manera el camino a seguir por el resto de CCAA.  Hay que recordar que, en los presupuestos más expansivos de la historia de España, las de emigración han sido de las pocas partidas presupuestarias que se han congelado y no han recibido ningún incremento” en el Gobierno central.

Durante el encuentro, el presidente de la Comisión Derechos Sociales incidió en la necesidad de mejorar los procedimientos de votación en el exterior, incrementando urnas alternativas, y asegurándose que a todo el mundo le llegan las papeletas a tiempo. “La baja participación que se ha registrado en muchos países, especialmente de América, ha sido un claro reflejo de la falta de sistemas postales que funcionen, y que impiden a muchas y muchos votantes emitir el voto por correo. Del mismo modo que la alta participación en países europeos como Alemania, en la demarcación consular de Berlín liderando con 37% o el Reino Unido, con una media superior al 20% demuestran lo contrario”.

David Casarejos, que agradeció a Barbón su ofrecimiento para que el próximo plenario del CGCEE se celebre en Asturias, tuvo palabras de reconocimiento a la labor de la exdirectora de Emigración y Memoria Democrática, Begoña Serrano, quien formó parte del CGCEE durante varios mandatos.

Casarejos explicó al presidente asturiano los problemas derivados del Brexit, y la discrepancia que existe entre los datos de ciudadanos registrados en el exterior por parte del Instituto Nacional de Estadística a través de las altas consulares, y los datos que registra la Home Office en el programa del Settled Status. “La diferencia entre ambos datos demuestra que la población española en el exterior sigue sin registrarse en los consulados y hay países en los que la cifra estimada es muy inferior a la real. Al 14% de población asturiana estimada en el exterior quizás haya que añadirle unos puntos porcentuales que incrementaría el peso del voto exterior”, concluyó.