Opinión

Sin Letras Galegas en Caracas

Sin Letras Galegas en Caracas

El reciente Día das Letras Galegas, dedicado a Xosé Filgueira Valverde, en Caracas pasó por debajo de la mesa, es decir no hubo ninguna celebración. Ningún acto en la Hermandad Gallega de Caracas (el lugar con más gallegos por metro cuadrado de Latinoamérica), que no tuvo 45 minutos para recordar que, como decía Castelao, si somos gallegos es por el idioma. El resto, la gastronomía, las gaitas, el folclore, los paisajes, la morriña, incluso la bandera, son adjetivos.

La celebración del idioma gallego y su preservación y difusión es una obligación estatutaria de la Hermandad Gallega de Venezuela en su artículo 2: “Las finalidades de la Asociación son las siguientes: culturales: Fomentar, divulgar, defender el idioma y la cultura gallega y los valores autóctonos de Galicia; promocionar nuestra cultura dentro de Venezuela y efectuar intercambios culturales con los demás pueblos; crear centros de cultura, con especial dedicación a Galicia y a Venezuela”.

Es el primer artículo, la finalidad para la que está constituida la Hermandad, en primer orden es defender y divulgar el idioma y la cultura gallega, excluyendo así todo lo otro, desde el Miss Hermandad hasta las pantallas gigantes de fútbol.

Podría haber un cambio estatutario, con la aprobación mayoritaria de los socios, no lo dudo ni por un momento, en el que los fines de la Hermandad fuesen: Art. 2: “Elegir Mis Hermandad y Miss Simpatía con la mayor aportación presupuestaria posible”; Art. 3: Dotar del mayor número de bares y restaurantes a la Hermandad, cuidando que sus precios sean “solidarios”; Art. 4: Mejorar la dotación de los gimnasios; Art. 5: Instituir el Día de la Sevillana en la Hermandad Gallega; y el Art. 6: Pantallas gigantes de televisión en toda la Hermandad con emisión constante de partidos de fútbol.

Pienso que los socios fundadores, humildes emigrantes gallegos, también disfrutarían del fútbol y de la cerveza y tal vez de los bailes exóticos sevillanos… pero “o noso é o noso” y mientras no lo conservemos nosotros, ningún sevillano, venezolano o madrileño lo va a hacer pero, por lo visto, otros vientos soplan entre los directivos de la Hermandad Gallega.