Opinión

El ‘post-2018’

Un ejercicio de predicción sobre lo que puede acontecer en 2018 en un mundo tan convulso y confuso como el actual supone entrar en el terreno de las expectativas inciertas. Intentaré por tanto adelantar algunas claves.

A pesar de los cambios que se palpan en el ambiente, el escenario internacional actual no termina de cerrar un ciclo iniciado en 1991, con la desintegración de la URSS. Curiosamente, el 2017 presenció el centenario de la revolución rusa, y el diagnóstico sobre cuál ha sido su impacto (si es que lo tiene) en la actualidad arroja más interrogantes que certezas.

El mundo de 2018 no parece anunciar una revolución como la de 1917. No obstante, sí es perceptible que estamos en una especie de ‘post-era’. El ‘post-capitalismo’ es un hecho irreversible, lo cual parece introducir al mundo en la hegemonía absoluta de la era digital. El siglo XXI que está por cumplir dos décadas de haber comenzado se sumerge en estas contradicciones propias de un cambio de era que no termina de fraguarse.

La única certeza sui generis que observamos es que estamos en el mundo ‘post’. El de la ‘pos-post-guerra fría’, el de la ‘post-verdad’ y sus ‘fake news’ (noticias falsas) que se asumen como verdaderas (Trump dixit). El de la ‘post-economía’, la ‘post-política’ y hasta la ‘post-sociedad’. Todo ello revela cambios y hasta crisis de identidades y de representaciones que se asumen tan inevitables como misteriosas.

En el 2017 vimos que el populismo ‘post-moderno’ también llega a las sociedades supuestamente ‘post-desarrolladas’ (Estados Unidos y Europa) mientras que la ‘post-democracia’ de talante autoritario se consolida en Rusia y China. Pero también que el ‘post-Estado-Nación’ sigue levantando dilemas (Cataluña) sin solucionarse una crisis económica que no sabemos si ya será ‘post-crisis’. 

En 2018 podremos quizás ver la ‘post-guerra’ siria, esa que en 2017 pareciera anunciar la era del breve ‘post-Estado Islámico’. O si el ‘post-chavismo’ y el ‘post-castrismo’ finalmente se consolidan en Venezuela y Cuba. Ni tampoco sabremos si Corea del Norte será la guerra ‘post-nuclear’ de 2018. Por cierto, el próximo año no veremos un ‘post-Trump’ ni un ‘post-Putin’ ni un ‘post-Xi Jinping’. Los tres conforman una troika que sí parece sólida, y sobre la cual gira la política internacional.

El mundo ‘post’ para 2018 será tan confuso como el de 2017. Por cierto, habrá Mundial de Fútbol de Rusia en verano. Lo que sí parece cierto es que será el último de Leo Messi y Cristiano Ronaldo. A ellos también les llegó su ‘post’. 

En todo caso, estimados lectores, lo que sí quiero transmitir son mis más sinceros agradecimientos por estar allí y al equipo de ‘Magazine Español’ por permitirme seguir compartiendo estas reflexiones semanales. Esta no es una ‘post’ columna. Felices Fiestas y Próspero 2018.