Ejército español en Afganistán y Chávez
Acaban de publicarse en la página antibélica sueca wikileaks http://wikileaks.org/Más de 90.000 documentos secretos estadounidenses (la filtración más grande de la historia) en los que se puede leer como los mandos del ejército estadounidense dicen (internamente) a otros mandos en los EUA, que mataron a supuestos “terroristas” (como si ellos no ejerciesen el terror) y de paso se ventilaron al doble de civiles.
Acaban de publicarse en la página antibélica sueca wikileaks http://wikileaks.org/
Más de 90.000 documentos secretos estadounidenses (la filtración más grande de la historia) en los que se puede leer como los mandos del ejército estadounidense dicen (internamente) a otros mandos en los EUA, que mataron a supuestos “terroristas” (como si ellos no ejerciesen el terror) y de paso se ventilaron al doble de civiles. La lista de asesinatos es interminable. Cómplice de la misión “humanitaria” para “liberar” (de la vida) a los afganos es el ejército español.
La propaganda nos pone a los soldados españoles (imagino que a gringos también) arreglando dientes y haciendo una escuelita. No deja de ser ridículo y patético que haya alguien que se crea que unos tipos en blindados le fueron a arreglar los dientes a los afganos y a liberar de la esclavitud a sus mujeres. Además de bochornoso, es caro, porque esa misión hay que pagarla, varios centenares de millones de euros, y aquí pocos dicen algo.
Los españoles ni sienten ni padecen lo que pasa lejos; más allá del estadio Bernabéu y de su pantalla de televisión para saber si Andreíta comió el pollo o si Julián Múñoz se lleva a la Pantoja a la cárcel. Aún así el hombre más aborrecido por los españoles es Hugo Chávez, según los medios que se encargan de que esa sea la opinión, como decía Galeano: “crean el paralítico y le acercan la silla de ruedas”.
Quien jamás agredió ni “arregló” los dientes a ningún pueblo del mundo para liberarlo (de la vida) concentra todos los odios contenidos de un pueblo que a duras penas sabe situar a Venezuela en el mapa; Afganistán imposible. Chávez que en lugar de soldados mandó aviones para recoger pacientes por toda Latinoamérica y pagarles, a cuenta del erario público venezolano, una operación de cataratas en Cuba, tiene esta pequeña guerra perdida... por ahora. Mientras miles y miles de afganos que aparecen en esos más de 92.000 documentos secretos, “liberados” de vivir (asesinados) no podrán arreglar los dientes, ni acompañar a sus hijos a la escuelita... y mucho menos operarse de cataratas.
Más de 90.000 documentos secretos estadounidenses (la filtración más grande de la historia) en los que se puede leer como los mandos del ejército estadounidense dicen (internamente) a otros mandos en los EUA, que mataron a supuestos “terroristas” (como si ellos no ejerciesen el terror) y de paso se ventilaron al doble de civiles. La lista de asesinatos es interminable. Cómplice de la misión “humanitaria” para “liberar” (de la vida) a los afganos es el ejército español.
La propaganda nos pone a los soldados españoles (imagino que a gringos también) arreglando dientes y haciendo una escuelita. No deja de ser ridículo y patético que haya alguien que se crea que unos tipos en blindados le fueron a arreglar los dientes a los afganos y a liberar de la esclavitud a sus mujeres. Además de bochornoso, es caro, porque esa misión hay que pagarla, varios centenares de millones de euros, y aquí pocos dicen algo.
Los españoles ni sienten ni padecen lo que pasa lejos; más allá del estadio Bernabéu y de su pantalla de televisión para saber si Andreíta comió el pollo o si Julián Múñoz se lleva a la Pantoja a la cárcel. Aún así el hombre más aborrecido por los españoles es Hugo Chávez, según los medios que se encargan de que esa sea la opinión, como decía Galeano: “crean el paralítico y le acercan la silla de ruedas”.
Quien jamás agredió ni “arregló” los dientes a ningún pueblo del mundo para liberarlo (de la vida) concentra todos los odios contenidos de un pueblo que a duras penas sabe situar a Venezuela en el mapa; Afganistán imposible. Chávez que en lugar de soldados mandó aviones para recoger pacientes por toda Latinoamérica y pagarles, a cuenta del erario público venezolano, una operación de cataratas en Cuba, tiene esta pequeña guerra perdida... por ahora. Mientras miles y miles de afganos que aparecen en esos más de 92.000 documentos secretos, “liberados” de vivir (asesinados) no podrán arreglar los dientes, ni acompañar a sus hijos a la escuelita... y mucho menos operarse de cataratas.