Opinión

‘Calidad de la educación’, ensayo del profesor Tedesco

Calidade da educación e políticas educativas corresponde al libro escrito por Juan Carlos Tedesco y publicado en la ‘Colección Formación e Innovación Educativa na Universidade’ del Vicerrectorado de la Universidad de Vigo. María Isabel Cebreiros Iglesias se encargó de la revisión y traducción del texto editado en 2009.
‘Calidad de la educación’, ensayo del profesor Tedesco
Calidade da educación e políticas educativas corresponde al libro escrito por Juan Carlos Tedesco y publicado en la ‘Colección Formación e Innovación Educativa na Universidade’ del Vicerrectorado de la Universidad de Vigo. María Isabel Cebreiros Iglesias se encargó de la revisión y traducción del texto editado en 2009. “Este libro reúne catro textos preparados en circunstancias diferentes –señala en el ‘Prólogo’ el profesor Tedesco–. Non obstante, están unidos por unha hipótese e un propósito común. A hipótese postula que estamos a atravesar un período de forte disociación entre o saber académico en educación e as esixencias da práctica profesional, tanto do desempeño docente nas aulas coma do deseño e implementación de políticas públicas. O propósito común destes textos consiste en contribuír, modestamente, a reducir esa brecha, xa que o saber académico ten cada vez maior relevancia social. Hoxe máis que nunca é preciso, retomando a feliz expresión de Gilles Lipovetsky, formar unha inteligencia responsable”.
Porque, en efecto, esta demanda social se sitúa en el contexto de las condiciones sociales creadas por el nuevo capitalismo. Convendría tener presente que la actividad científica es más relevante, pero al mismo tiempo más limitada: las prácticas científicas actuales invirtieron la lógica tradicional, pues donde primero se experimentaba era en el laboratorio y luego se aplicaba en la realidad. El profesor Ulrich Beck –quien nos ofreció un profundo análisis de este tema– advierte que en la ciencia actual en primer lugar es necesario aplicar las teorías y producir ciertos fenómenos para después estudiar sus propiedades y características.
“É preciso producir primeiro nenos probeta, liberar criaturas artificiais xeneticamente modificadas e construír reactores, para poder estudar as súas propiedades e características de seguridade”, escribiera el profesor Beck. En un contexto de este tipo, la ciencia revela sus límites para dar respuestas a las preguntas por el sentido de nuestras acciones. Respuestas que dependen básicamente de la política y de la ética. Desde este punto de vista estaríamos pasando de una práctica profesional basada en el modelo de la ciencia social a una práctica en la cual –sin abandonar el rigor metodológico propio de la ciencia– es necesario apoyarse en la filosofía social. Su autor, Juan Carlos Tedesco, nos indica a los lectores que los presentes textos de pensamiento no son neutrales.
En el primer capítulo el profesor argentino inquiere por qué hoy es tan importante la dimensión internacional. Considera asimismo el “aprender a vivir juntos” y el “aprender a aprender”. Plantea la “nueva agenda educativa” al igual que “la dimensión pedagógica”. “Las nuevas tecnologías de la información y comunicación, y el futuro de la educación” ocupan el capítulo segundo. Reflexiona acerca de la dimensión técnico-política así como también de las tecnologías de la información y comunicación y de la desigualdad educativa. A lo largo del capítulo tercero estima “las políticas educativas y la toma de decisiones: tensiones y oportunidades”. La necesidad del cambio educativo y cómo se definen las prioridades. Las reformas pedagógicas con un “nuevo actor: la cooperación internacional” y, desde luego, el valor de la comunicación. La “variable temporal y el fortalecimiento institucional”. La “profesionalización docente” centra, por último, el capítulo cuarto, con la “masificación y diversificación de la profesión docente” y “carácter integral de las políticas futuras”.