El acto por la Fiesta Nacional reunió a unas 800 personas en el salón ‘La Esmeralda’, del Grupo de Festejos Mar

Jesús Silva: “Ningún país ha trabajado tanto como España para ayudar a hacer posible la concordia entre venezolanos”

Como cada año, la Embajada del Reino de España ante la República Bolivariana de Venezuela celebró la Fiesta Nacional y el Día Mundial de la Hispanidad. La Quinta La Esmeralda, fue el escenario en el que la tarde-noche del jueves 10 de octubre –dos día antes de la efeméride–, autoridades venezolanas, el Cuerpo Diplomático acreditado en el país iberoamericano, miembros de instituciones españolas así como de los partidos políticos españoles con representación en el país (PP, PSOE y CC); y demás invitados, conmemorando así la máxima fiesta española. 
Jesús Silva: “Ningún país ha trabajado tanto como España para ayudar a hacer posible la concordia entre venezolanos”
Interior
El embajador de España, junto al consejero y agregado de Interior, y a los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la Embajada y Consulado General.

Como cada año, la Embajada del Reino de España ante la República Bolivariana de Venezuela celebró la Fiesta Nacional y el Día Mundial de la Hispanidad. La Quinta La Esmeralda, fue el escenario en el que la tarde-noche del jueves 10 de octubre –dos día antes de la efeméride–, autoridades venezolanas, el Cuerpo Diplomático acreditado en el país iberoamericano, miembros de centros, asociaciones, fundaciones, federaciones y entidades españolas con sede en Venezuela, consejeros del CRE (Consejo de Residentes Españoles), y consejeros generales de la Ciudadanía Española en el Exterior (cgcee), personalidades vinculadas al gremio empresarial, político, cultural y de medios de comunicación de ambas naciones, directores de la Fundación España Salud (FES), de la Cámara Venezolano Española de Industria y Comercio (Cavespa), así como de los partidos políticos españoles con representación en el país (PP, PSOE y CC); y demás invitados, conmemorando así la máxima fiesta española. 

Asimismo, estuvieron presentes los representantes de la Legación Diplomática y Consular española, José Hornero Gómez, ministro consejero; la consejera de Asuntos Culturales, Laura López García; el consejero Económico y Comercial, Sergio Atance Hernández; el (Cnel. Ej.) Alejandro Rubiella Romañach, agregado de Defensa, Militar, Naval y Aéreo; el consejero de Interior, Daniel Salgado Veiga; el agregado de Interior Santiago Alonso Pradillo; el cónsul adjunto, Julio Navas López; así como Richard Barreiro y Olmedo, cónsul honorario acreditado en Anzoátegui, recurrente a Sucre y Monagas y director de ‘Magazine Español’, y personal de apoyo tanto de la Embajada como del Consulado General en Caracas, de la Oficina Económica y Comercial y de la Consejería de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.

La celebración fue propicia para dar la bienvenida al nuevo cónsul general de España en Caracas, Juan José Buitrago de Benito, y su esposa, María Victoria Peña Hernando; al nuevo cónsul adjunto encargado del Registro Civil Consular, Mario Crespo Ballesteros; al nuevo consejero de Información, Enrique Cerezo Guijarro; y al nuevo canciller de la Embajada, Manuel Alamar Segovia, quienes participaron en su primera Fiesta Nacional en este país.

Los distinguidos invitados fueron recibidos una vez más por la comitiva encabezada por el embajador y su séquito, en la entrada del lujoso salón ‘La Esmeralda’, del Grupo de Festejos Mar, que dirige Francisco Rodríguez Sobral, que acogió alrededor de unas ochocientas personas, con una inmensa bandera de España que adornaba el techo del estupendo salón.

Los asistentes pudieron disfrutar de un ambiente de fraternidad, donde la gastronomía española también se hizo presente con una representación de distintas comunidades autónomas, con jamón ibérico, paella estilo valenciano, tortilla española, empanada gallega, variedad de quesos, entre ellos el afamado manchego, y variados canapés, como el tequeño venezolano y los arruchaditos. En el renglón de bebidas se sirvió cava, vino español, cócteles, ron venezolano, cerveza y whisky escocés.

Los anfitriones de la jornada, Jesús Silva Fernández, acompañado de su esposa, Sara de la Lastra Bécker, conmemoraron junto a todo el equipo diplomático y consular la ‘Fiesta Nacional’, el ‘Día Mundial de la Hispanidad’ y el ‘Encuentro entre Dos Mundos’, desde que hace 527 años, el almirante de la Mar Océano, Cristóbal Colón, arribara al Nuevo Continente. 

Para ello, el jefe de la Misión diplomática española se dirigió a los presentes, tras entonarse con solemnidad el ‘Gloria al Bravo Pueblo’, himno de la República Bolivariana de Venezuela, y la ‘Marcha Real’, himno del Reino de España, y siendo presentado por Laura López García, consejera de Asuntos Culturales.

El embajador comenzó agradeciendo la presencia de los asistentes, y resaltando que: “Durante todo este tiempo, en las buenas ocasiones y también en las menos buenas, he podido constatar lo intensas y variadas que son las relaciones entre Venezuela y España. Unas relaciones que hunden sus raíces en una rica historia en común y que son hoy en día muy visibles observando lo mucho que nos une. Por eso, más allá de polémicas, la fecha del 12 de octubre aspira a ser algo moderno y de futuro, y simbolizar una comunidad de países y de personas a ambos lados del océano con mucho en común sobre lo que construir, usando el mismo idioma, un futuro conjunto de cooperación, prosperidad y hermandad”. “Pero más allá de proyectos y contactos bilaterales, las relaciones entre los pueblos de Venezuela y de España van más allá de coyunturas o de gobiernos concretos. Se basan en siglos de vida en común, de proyectos compartidos como testimonian los 160.000 españoles que aún residen en Venezuela. Hoy la gran mayoría son hispano-venezolanos, descendientes de aquellos que fueron recibidos con generosidad en una tierra hospitalaria y que les ofrecía las oportunidades que España les negaba, sumida en enfrentamientos fratricidas producidos por el sectarismo y la negación del adversario político. España supo reponerse de esa tragedia e iniciar en 1975, a la muerte del dictador, un periodo que ha sido el mejor de su historia. Tras años sin libertad, los españoles fuimos capaces de llegar a acuerdos y transformar una dictadura en una vibrante democracia, que en los últimos 40 años ha permitido los mayores progresos históricos en todos los ámbitos de la vida española, tanto la política, como la social, económica, empresarial, educativa o incluso la deportiva. (…) Esa concordia y prosperidad que España ha alcanzado en estos últimos 40 años de democracia es exactamente lo mismo que deseamos para los venezolanos. Nuestros destinos están unidos y todo lo que es bueno para Venezuela es bueno para España”. 

“Por eso ningún país ha trabajado tanto como España en los últimos tiempos para ayudar a hacer posible la concordia entre venezolanos que les permita vivir en paz, sin exclusiones y con pleno respeto a los derechos humanos, en un clima que permita la prosperidad y el desarrollo social y económico de sus ciudadanos. España seguirá trabajando por la paz entre venezolanos igual que hicimos hace 40 años para reconciliar a los españoles. Y seguiremos reclamando, con respeto, que se garantice un marco que permita llegar a acuerdos y evitar abusos o violaciones de derechos humanos”. 

“Y todo ello en el marco de la política de la Unión Europea hacia Venezuela, con la que España está plenamente identificada. En los próximos días un veterano político español, el actual ministro de Asuntos Exteriores de España, Josep Borrell, asumirá un importante cargo en la Unión Europea, como máximo responsable de la acción exterior europea. Es una persona que conoce muy de cerca la situación en Venezuela y a los actores principales implicados en una posible solución a la crisis. Y la Unión Europea y España, han sido muy claros al impulsar una solución pacífica y democrática a la crisis venezolana”, enfatizó.

El embajador español prosiguió con sus palabras augurando por un buen futuro. “Permítanme que sea optimista y apueste por este gran país que se llama Venezuela. Al igual que pasó en España, Venezuela puede resolver sus problemas. Puede ser un país justo y próspero, democrático, con alternancia democrática y pacífica en el poder, con respeto a las libertades individuales y colectivas de sus ciudadanos. Tiene el talento de sus gentes y su patriotismo. Solo hay que proponérselo, llegar a acuerdos de buena fe, no basta con negociar, ya sea en Oslo o en otros foros. Hay que querer llegar a acuerdos, con altura de miras y visión de futuro. Y en ese afán España estará a su lado para ayudar a nuestros hermanos venezolanos”.

“España quiere también ser solidaria con los más de 300.000 venezolanos que han tenido que abandonar su país para establecerse en España, muchos con doble nacionalidad. Han sido recibidos con los brazos abiertos y protagonizan muchas historias de éxito profesional o personal. Son queridos y respetados. Y ello es de justicia por la deuda que teníamos con Venezuela, por lo mucho que hicieron los venezolanos por los españoles cuando fuimos nosotros los que tuvimos que emigrar a Venezuela. (…) Algunos de ellos siguen viviendo en Venezuela junto a sus familias. También con ellos España muestra su solidaridad, ya sean canarios, gallegos, asturianos o catalanes, diseminados por todo el país, agrupados en los casi 90 centros españoles existentes por toda la geografía venezolana, algunos de cuyos presidentes y directivos nos acompañan hoy aquí. El Gobierno español y las comunidades autónomas de regiones españolas como Galicia o Canarias están haciendo un gran esfuerzo de solidaridad con los españoles más necesitados de Venezuela. A través de la Fundación España Salud y de los diversos programas asistenciales, España atiende anualmente a casi 10.000 españoles necesitados y destina más de 15 millones de euros para ayudas de distintos tipos, en especial para mayores de 65 años”. 

Para finalizar su discurso, Jesús Silva Fernández transmitió un mensaje de afecto dirigido a la comunidad española, además agradeció a todos los miembros de la Embajada y del Consulado General, de los Consulados y Viceconsulados Honorarios, de los centros e instituciones españolas por su trabajo, esfuerzo y dedicación, y a las empresas por haber colaborado en la celebración de este magno evento. Silva Fernández también reiteró un año más su agradecimiento por el apoyo de su esposa, Sara, y “por que el espíritu de entendimiento y fraternidad entre Venezuela y España siga fortaleciéndose”.

El diplomático alzó su copa e invitó a un brindis con un: “¡Viva Venezuela!, ¡viva España! y ¡viva el Rey!”.

La celebración por la Fiesta Nacional, la Hispanidad y el ‘Encuentro entre Dos Mundos’ culminó cercana a las once de la noche.