Dice de que es fundamental garantizar la seguridad del personal español en el país

La CSIF pide pasaportes diplomáticos para los funcionarios españoles en Venezuela y repatriaciones voluntarias

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) quiere que el Gobierno facilite pasaportes diplomáticos al personal funcionario español en Venezuela, para garantizar su movilidad y sus labores de abastecimiento, y que se repatríe al personal del servicio exterior que voluntariamente quiera volver a España.

La CSIF pide pasaportes diplomáticos para los funcionarios españoles en Venezuela y repatriaciones voluntarias

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) quiere que el Gobierno facilite pasaportes diplomáticos al personal funcionario español en Venezuela, para garantizar su movilidad y sus labores de abastecimiento, y que se repatríe al personal del servicio exterior que voluntariamente quiera volver a España.

También reclama que se pueda trasladar temporalmente a los empleados públicos que lo soliciten a terceros países limítrofes para seguir cumpliendo sus funciones desde allí en unas condiciones de mayor seguridad.

En un comunicado, el sindicato ha explicado que iniciará próximamente una ronda de contactos con los grupos parlamentarios para analizar la situación en Venezuela, después de que España haya reconocido a Juan Guaidó, como presidente encargado del país.

En esta situación, ha advertido de que es fundamental garantizar la seguridad del personal español en el país, así que ha valorado positivamente que se hayan duplicado los efectivos de los cuerpos de operaciones especiales.

También ha reclamado al Gobierno que abra una vía de suministro de medicamentos esenciales para todo el personal de la Embajada, tanto funcionario, como laboral, y ha aprovechado para reclamar para estos últimos el complemento de peligrosidad.

Para el sindicato, el personal laboral está en una “situación de abandono absoluto” por parte del Gobierno, dado que aún está pendiente la actualización de sus condiciones y sus salarios, que llevan 10 años congelados, y no se les aplicarán las actualizaciones previstas en los Presupuestos Generales del Estado para los empleados públicos. En Venezuela, avisa, convive la peligrosidad con una altísima inflación.