En respuesta a una pregunta de la senadora de En Comun Podem Sara Vila

Calvo se compromete a dar la nacionalidad en los dos supuestos que afectan a un mayor número de descendientes

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, se comprometió a dar la nacionalidad a los descendientes de las mujeres a las que se les quitó por casarse en el extranjero y los hijos que eran mayores de edad cuando sus padres accedieron a la nacionalidad por la Ley de Memoria Histórica, creando una discriminación en el seno de las familias.

Calvo se compromete a dar la nacionalidad en los dos supuestos que afectan a un mayor número de descendientes
Calvo Vila
Carmen Calvo y Sara Vila.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, se comprometió a dar la nacionalidad a los descendientes de las mujeres a las que se les quitó por casarse en el extranjero y los hijos que eran mayores de edad cuando sus padres accedieron a la nacionalidad por la Ley de Memoria Histórica, creando una discriminación en el seno de las familias.

En su respuesta en el Senado a la pregunta de la senadora Sara Vila, de En Comun Podem, sobre la necesidad de ampliar los supuestos de la nacionalidad recogidos en el anteproyecto de Ley de Memoria Histórica, Carmen recordó que “la dictadura dejó a muchos compatriotas como apátridas, les robó su nacionalidad, la hicieron desaparecer y, en este momento, todavía tenemos deudas pendientes”, que este proyecto pretende resolver.

La vicepresidenta recordó que hubo mujeres “que por razones legales y de sexismo” tuvieron que renunciar a la nacionalidad en el momento de casarse en el extranjero y que por eso sus descendientes no pueden ser españoles. “Volverán a serlo, este país se lo debe, es una restitución del honor y de la dignidad de ser españoles”.

Calvo reconoció que la Ley de Memoria Histórica de 2007 inició el debate para “recuperar la verdad y la justicia de nuestro pasado en términos de memoria democrática”, pero también que generó situaciones de desigualdad en el acceso a la nacionalidad. En este punto, aseguró que “tenemos que equiparar a hermanos mayores y menores”, de manera que los que eran mayores de edad cuando sus padres accedieron a la nacionalidad ahora también puedan acceder.

En su cuenta de twitter, Vila se mostraba satisfecha por haber conseguido este compromiso del Gobierno, ya que “son los dos supuestos más importantes y que afectan a la mayoría de exiliados”.

Durante su intervención en el debate, la senadora Vila aseguró que “el anteproyecto de ley de memoria democrática es un gran acierto, es urgente y necesario”, ya que “se trata de reconocer la verdad, de hacer justicia, de reparación y de la memoria de las víctimas de la Guerra Civil y del franquismo”.

“Está Ley –aseguró– fortalecerá sin duda nuestra democracia y esperamos que un futuro ayude también a que haya el consenso social y político que tanta falta nos hace”.

Vila aseguró que España tienen una deuda con los exiliados y exiliadas, pero “especialmente con las exiliadas y sus descendientes” y se recordó que son cuatro los supuestos que hay que reparar tras la Ley de Memoria Histórica de 2007, que “aunque fue un gran avance, no fue suficiente y tampoco lo es el código civil”.

El primer supuesto –explicó– son las mujeres que se casaron con un extranjero antes de la Constitución de 1978 y por eso perdieron la nacionalidad; el segundo, son los hijos mayores de 18 años que vieron que sus hermanos menores de edad si conseguían la nacionalidad mientras ellos no; el tercero, los que tuvieron que adquirir la nacionalidad de destino y tuvieron que renunciar a la nacionalidad española para poder trabajar en el país de destino y, finalmente, los que no ratificaron su nacionalidad al cumplir la mayoría de edad porque no fueron debidamente informados.