Del autoconsumo a la exportación

Del autoconsumo a la exportación

Las pequeñas dimensiones de las explotaciones agropecuarias de Galicia han llevado a que, tradicionalmente y durante muchos años, este sector estuviese destinado al autoconsumo y tuviese un alcance muy limitado. 

La creación de denominaciones de origen protegidas (DOP) y las indicaciones geográficas protegidas (IGP) han permitido a los productos agroalimentarios gallegos dar un importante salto, tanto cualitativo como cuantitativo, para convertirse en productos más competitivos y atractivos en el mercado que le han llevado a tener una proyección internacional mucho más destacada. 

Además de su dinamización y proyección, las DOP y IGP suponen unas garantías de calidad, ya que hay un importante control sobre la calidad de los productos, tanto en el proceso de producción como en el de comercialización.