EL MODELO DE AUTOGOBIERNO PARA EUSKADI Y EL PROCESO DE PACIFICACIóN CENTRARON SUS INTERVENCIONES

El Parlamento vasco designa a Urkullu nuevo lehendakari

Íñigo Urkullu, que fue nombrado este jueves por el Parlamento vasco quinto lehendakari de la democracia con los únicos votos del PNV, apeló al acuerdo y al consenso para afrontar los retos de Euskadi esta legislatura.

El Parlamento vasco designa a Urkullu nuevo lehendakari
Urgullo es aplaudido, tras su elección. por algunos diputados y asistentes al Pleno.

Íñigo Urkullu, que fue nombrado este jueves por el Parlamento vasco quinto lehendakari de la democracia con los únicos votos del PNV, apeló al acuerdo y al consenso para afrontar los retos de Euskadi esta legislatura.

El Parlamento vasco votó por la mañana por segunda vez las dos candidaturas presentadas, la de Urkullu y la de Laura Mintegi (EH Bildu), quien también recibió únicamente el apoyo de su coalición, 21 votos. El miércoles ninguno de los dos logró la mayoría absoluta, 38 de los 75 votos posibles y ayer, en la segunda votación, sólo se requería la mayoría simple. Urkullu sumó los 27 votos de su partido, dado que el PSE-EE, el PP y UPyD se abstuvieron.

El pleno se limitó a efectuar esta segunda votación sin intervenciones, excepto la del nuevo lehendakari al concluir la sesión. Por primera vez, las votaciones no se hicieron con papeletas, sino que de forma pública los parlamentarios dijeron el nombre del candidato que apoyaban o bien se abstuvieron.

Al concluir las votaciones, la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejería, leyó los resultados y designó, en nombre del Parlamento vasco, a Urkullu como lehendakari, que hoy viernes es nombrado por el rey y el sábado tomará posesión del cargo en un pleno extraordinario del Legislativo en la Casa de Juntas de Gernika, símbolo de las libertades del pueblo vasco.

Al concluir el pleno, Urkullu recibió la felicitación de su antecesor en el cargo, Patxi López, con quien habló unos instantes en medio del salón de plenos.

Antonio Basagoiti (PP), Laura Mintegi (EH Bildu) y Gorka Maneiro (UPyD) reconocieron la necesidad que va a tener el nuevo Gobierno de llegar a acuerdos, pero matizaron que “arrimarán el hombro’ en función de los planteamientos que presente”.

Durante el Debate de Investidura, Urkullu defendió que el nuevo estatus de autogobierno para Euskadi sea acordado en el Parlamento Vasco entre todas las sensibilidades políticas y que sea respetuoso “con la democracia y el pacto”.

Urkullu apostó por la constitución de una ponencia en el Parlamento vasco que trabaje para actualizar el estatus político a través del diálogo entre quienes defiendan la “indisoluble unidad constitucional hasta la independencia”.

“Nos encontramos ante una nueva transición: la transición vasca”, aseguró Urkullu, tras recordar que Euskadi afronta un nuevo tiempo sin violencia ni terrorismo después de dejar atrás la “dictadura del terror” de ETA.

Reivindicó un nuevo sistema de autogobierno que incorpore el reconocimiento de la “realidad nacional” del País Vasco “diferenciada” y “un sistema bilateral de garantía”. Además, recordó que Euskadi forma parte de una Europa diversa en la que la identidad vasca es “muestra viva”.

En materia de pacificación, el próximo lehendakari recalcó que Euskadi tiene una “oportunidad histórica” para consolidar la paz y asentar la convivencia, también a través de acuerdos entre diferentes compartiendo el principio básico de la dignidad humana y asumiendo que ninguna causa se puede anteponer al respeto a la vida.

El nuevo presidente añadió que las víctimas no pueden quedar sin reparación, porque la paz es memoria, y reconoció que la reconciliación, la concordia y la convivencia demandan una valoración crítica del pasado, el reconocimiento del daño causado y la reparación.

“Debemos ser capaces de desactivar las dinámicas de enfrentamiento e imposición, volver a humanizar las relaciones personales, sociales y políticas”, sentenció. Lo importante, dijo Urkullu, es avanzar “sin precipitaciones ni urgencias” pero juntos a través de la continuidad de la ponencia de paz y convivencia que ya arrancó en la anterior legislatura en el Parlamento.