El PP insiste en que el problema de las tributaciones de los retornados quedará solucionado a partir del 1 de enero

Los problemas que los emigrantes retornados están padeciendo por no haber tributado por sus pensiones del extranjero “quedarán solucionados” a partir del 1 de enero con la entrada en vigor de la reforma de la Ley del IRPF, según dijo el portavoz del Grupo Popular, Pedro Puy, durante un debate celebrado el martes de esta semana en el Parlamento gallego a propósito de una propuesta del BNG para modificar la Ley de 2006 “para acabar con la discriminación fiscal que sufren 200.000 emigrantes retornados”. En el caso de este colectivo, Hacienda les obliga a tributar “a partir de unos ingresos de 11.200 euros anuales”, denunció la diputada del BNG Tereixa Paz, “mientras el resto de jubilados que perciben pensiones de la Seguridad Social estatal no tienen la obligación de tributar por ingresos inferiores a los 22.000 euros”.

La iniciativa nacionalista fue rechazada en la Cámara gallega –40 votos en contra (PP), 34 a favor (BNG, PSdeG y AGE)– en una jornada en la que unos dos mil emigrantes retornados se agolpaban a las puertas del Parlamento para seguir la propuesta del BNG.

En el contexto actual, Puy consideró la proposición de ley por parte del BNG como “un intento de aprovechar un descontento –que comprendemos e intentamos que se corrija– con afán electoralista”, ya que los diputados del BNG “saben que está en trámite en el Senado la reforma legislativa para que se les devuelva todo el dinero de multas, todo el dinero de intereses y se suspendan todos los expedientes”.

Puy aclaró al respecto que a partir del próximo 1 de enero, gracias a la reforma tributaria de la Ley de 2006, estos emigrantes no van a pagar sanciones ni intereses, dispondrán de un plazo de seis meses para regularizar su situación y se les van a devolver cantidades por 20 millones de euros a aquellas personas a las que se les cobraron sanciones e intereses. Así mismo, apunta que se va a seguir aplazando el cumplimiento de las obligaciones fiscales atendiendo a las circunstancias de los afectados.

Puy abogó por una devolución de oficio de las sanciones y de los intereses abonados por los emigrantes retornados, que “los diputados y senadores del PP en las Cortes Generales están intentando que se incorpore a la normativa en la fase de enmiendas a la modificación legislativa”.

El portavoz del PP recordó que el problema surgió en 2013 cuando en la Agencia Tributaria tuvieron conocimiento de unas rentas percibidas por residentes en España y que no eran declaradas. Tras conocer las acciones emprendidas por la administración central contra este colectivo, el Parlamento gallego aprobó una proposición no de ley de forma conjunta en la que se pedía “que no se les cobraran multas y que no se les pidiese el pago inmediato sino haciendo aplazamientos de la cuota tributaria”, recordó Puy, quien matizó: “Considerábamos de justicia la demanda de los emigrantes retornados y por eso tanto el presidente de la Xunta como la conselleira de Facenda se movieron a todos los niveles”.

Respecto a la petición de exención fiscal de todas las pensiones del extranjero, que propone el BNG, el diputado ‘popular’ dijo que no la pueden “apoyar”, porque “sería establecer una nueva injusticia en relación con los demás pensionistas españoles que tienen dos rentas”.

En este sentido, Puy explicó que “las retenciones generan problemas cuando la fuente no es nacional y tiene que funcionar un mecanismo de información ajeno a la Administración española”. Al respecto, matizó: “No es lo mismo recibir dos rentas que suman 20.000 euros y tributar mediante el mecanismo adelantado de retención en base a que cada pagador retiene por los 10.000 euros que tributa, que recibir 20.000 de un solo pagador que retiene, como consecuencia de la progresividad, una cantidad superior”.

“Estamos hablando de que nuestro sistema tributario establece una obligación de tributar igual para todos, pero cuando las fuentes son del extranjero puede generar distorsiones en su aplicación”, señaló el portavoz popular, quien insistió : “Desde el primer momento somos conscientes de que estas personas que no tributaron no eran defraudadores”, sino que “tenían mala información, porque la Agencia Estatal Tributaria no actuó y, además, porque es un colectivo especialmente vulnerable al desconocimiento por haber vivido fuera de España durante un largo tiempo”.

El portavoz ‘popular’ también lamentó que este proceso “esté generando muchas molestias derivadas de las inercias de la Agencia Tributaria que, sabiendo a que a partir del 1 de enero se va a proceder a esta devolución, todavía sigue actuando y no suspendió sus acciones”.

Protesta

La sesión parlamentaria vino precedida de una manifestación convocada por la Coordinadora Galega de Emigrantes Retornados, a la que asistieron alrededor de dos mil personas llegadas desde distintos puntos de Galicia.

“Pese al veto del PP, vamos a seguir luchando con vosotros en las calles y en el Parlamento, aquí y en Madrid, para evitar que nuestros emigrantes retornados sean discriminados por el Ministerio de Hacienda y por la Agencia Tributaria”, dijo Tereixa Paz, dirigiéndose a los afectados.

Durante el debate, Paz hizo entrega al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de una maleta como símbolo de la emigración, “por encargo de las personas que están ahí fuera y luchando por sus derechos”, apostilló. En la maleta, previamente, transportaron la documentación acreditativa de las 30.000 firmas que entregaron en el registro de la Cámara.

“No son defraudadores, los defraudadores están más relacionadas con la calle Génova que con las aldeas de este país”, remarcó Tereixa Paz, en alusión a los casos de corrupción que se están destapando en España en las últimas semanas y que afectan sobre todo a políticos del PP.