El PP obtuvo el 40% de los 5.404 votos emitidos; el BNG, el 19,6% y el PSdeG, el 18,1%

La pandemia redujo a la mitad los votos del exterior en estas elecciones con respecto a las autonómicas de 2016

El número de votos válidos en las elecciones del pasado 12 de julio se redujo a la mitad con respecto a las anteriores autonómicas de septiembre de 2016. De los 10.708 registrados el 25-S a los 5.395 contabilizados en el recuento de este lunes, los efectos del coronavirus se dejaron sentir en esta cita con las urnas entre los votantes del exterior, sobre todo entre los residentes en América. 
La pandemia redujo a la mitad los votos del exterior en estas elecciones con respecto a las autonómicas de 2016

El número de votos válidos en las elecciones del pasado 12 de julio se redujo a la mitad con respecto a las anteriores autonómicas de septiembre de 2016. De los 10.708 registrados el 25-S a los 5.395 contabilizados en el recuento de este lunes, los efectos del coronavirus se dejaron sentir en esta cita con las urnas entre los votantes del exterior, sobre todo entre los residentes en América –de donde proceden el mayor número de sufragios de la diáspora gallega–, continente que vive meses de asolamiento por la repercusión del virus y por las medidas impuestas por los gobiernos para sofocarlo. 

Las cifras respecto al número de votos no dejan lugar a dudas sobre el cariz que está tomando esta crisis sanitaria en los países de mayor acogida de gallegos emigrados, donde las trabas para votar debido al Covid-19 se sumaron en esta ocasión a las dificultades que de por sí entraña el voto rogado impuesto a los residentes en el exterior, que redujo la participación electoral de modo alarmante desde su entrada en vigor, en el año 2011.

De los 10.708 votos válidos de las autonómicas de 2016 a los 5.395 de esta cita con las urnas el virus, como ya se venía alertando, se dejó sentir en el voto del CERA (Censo Electoral de Residentes Ausentes), que partía con un censo de 463.181 electores y alcanzó una participación de tan solo el 1,2% del total. Esta circunstancia repercutió de manera notable en el respaldo a los partidos, que vieron reducidos a la mitad los apoyos, salvo en el caso del BNG que, en línea con la progresión que tuvo en el territorio, más que duplicó los resultados de la anterior convocatoria autonómica, al pasar de 468 a 1.064 votos en esta ocasión. El descalabro de las ‘mareas’, que en 2016 obtuvo nada más y nada menos que 1.734 votos, lo aprovechó el partido de Ana Pontón, que sentará a 19 diputados en la Cámara gallega, frente a los seis de la pasada legislatura.

En el caso del PP, los 5.267 votos de 2016 se convirtieron en 2.188 el pasado 12-J y en el del PSdeG-PSOE, se redujeron a la mitad, ya que frente a los 1.839 de entonces logró 982. El PP consiguió en estas elecciones poco más del 40% del voto total del CERA  –que ascendió a 5.404 papeletas, de las cuales, 9 fueron declaradas nulas–, frente al 19,6% del BNG, que logró desbancar al PSdeG como segunda fuerza más votada. Los de Gonzalo Caballero, que no levantan cabeza en Galicia y mantienen los 14 diputados de la pasada legislatura, se quedaron con un respaldo del 18,1% del voto del CERA. Mientras, el PP de Feijóo añade gracias al voto exterior un diputado a los 41 obtenidos en las elecciones de 2016 y 2012 y, después de 12 años gobernando en Galicia, lejos de acusar el desgaste del poder, se ha situado cerca de los 43 que logró Fraga en la cuarta legislatura (1993). 

Los efectos del Covid-19 en el electorado se hacen patentes a la hora de analizar los resultados por provincias. En A Coruña, el PP pasó de 1.888 votos a 799; el BNG subió de 203 a 428; y el PSdeG redujo el respaldo de 677 a 353. En el caso de Lugo, el PP recibió en esta ocasión 141 votos, frente a los 595 del 25-S; el PSdeG, 92 (288) y el BNG, que fue tercera fuerza en esta provincia, 83 (36). En Ourense, el PP obtuvo 508 votos (1.059), el PSdeG, 197 (344) y el BNG, 139 (58). Por último, en Pontevedra, donde el PP se jugaba un escaño que le fue arrebatado en la noche electoral a última hora por el PSdeG-PSOE, el PP fue igualmente la fuerza más votada, con 746 sufragios (1.725); el BNG obtuvo 414 (171) y el PSdeG, 340 frente a los 530 de la anterior convocatoria autonómica.

Revisión de votos nulos

Tras el recuento del voto exterior, se procedió a revisar más de 4.600 papeletas declaradas nulas del escrutinio general en la provincia de Pontevedra, a petición de los socialistas, que pretendían así agotar todos los cartuchos para evitar que el PP sumara un diputado más a los 41 obtenidos en la noche electoral, pero el resultado no hizo variar el número de representantes que dejó el recuento del voto del CERA. Si acaso, el PP incrementó en número de votos la diferencia con el PSdeG, según fuentes del Partido Popular.

El escrutinio definitivo concluye que de los 907.090 votantes censados en la provincia de Pontevedra, ejercieron su derecho al voto el pasado 12-J un total de 457.613. Un total de 192.147 papeletas fueron para el PP; 111.901 para el BNG y 104.734 para el PSdeG-PSOE. 3.647 electores emitieron su voto en blanco, mientras que, tras la revisión, 4.099 sufragios fueron declarados nulos.