Es presidenta de la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica

La ourensana Ana Fernández-Teijeiro habló en la Casa de Galicia de Madrid sobre los retos del cáncer en menores

La doctora ourensana Ana Fernández-Teijeiro, presidenta de la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica (SEHOP) y directiva de Asomega (Asociación de Médicos Gallegos), ofreció en la Casa de Galicia la conferencia ‘Retos actuales del cáncer en niños y adolescentes en España’, enmarcada en el ciclo de conferencias ‘Medicina y Humanidades’, que desarrolla Asomega y dirige y coordina su presidente, el doctor Julio Ancochea.

La ourensana Ana Fernández-Teijeiro habló en la Casa de Galicia de Madrid sobre los retos del cáncer en menores
M. Carrero, Julia Buján, Juan José Fernández-Teijeiro, Ana Fernández-Teijeiro, R. Jiménez y J. Ancochea
Miguel Carrero, Julia Buján, Juan José Fernández-Teijeiro, Ana Fernández-Teijeiro, Ramón Jiménez y Julio Ancochea.

La doctora ourensana Ana Fernández-Teijeiro, presidenta de la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica (SEHOP) y directiva de Asomega (Asociación de Médicos Gallegos), ofreció en la Casa de Galicia la conferencia ‘Retos actuales del cáncer en niños y adolescentes en España’, enmarcada en el ciclo de conferencias ‘Medicina y Humanidades’, que desarrolla Asomega y dirige y coordina su presidente, el doctor Julio Ancochea.

Intervinieron en el acto, además de la conferenciante, el doctor Ancochea; el doctor Miguel Carrero, presidente de Previsión Sanitaria Nacional, organización patrocinadora del ciclo; y el coordinador de Actividades de la Casa, Ramón Jiménez, quien dio la bienvenida a los participantes y presentó el acto en representación del delegado de la Xunta y director de la Casa de Galicia, José Ramón Ónega.

Ancochea presentó a la conferenciante, señalando que Fernández-Teijeiro forma parte de la Junta Directiva de Asomega desde el pasado 3 de mayo. “Ana Fernández-Teijeiro, natural de Pobra de Trives (Ourense) es jefe de Sección de Oncohematología Pediátrica del Hospital Universitario Virgen Macarena (Sevilla) y, desde mayo de 2016, presidente de la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica”, ilustró.

“Las neoplasias malignas pediátricas presentan una incidencia de 15 nuevos casos al año por cada millón de niños menores de 14 años, destacando las leucemias, los tumores del sistema nervioso central, los linfomas y los tumores de la cresta neutral. El Registro Español de Tumores Infantiles muestra un incremento progresivo de las posibilidades de curación de los niños y adolescentes con cáncer en España, si bien deben mejorarse estas tasas de curación y mejorar su calidad de vida, reduciendo los efectos secundarios de la medicación”, adelantó el presidente de Asomega.

Carrero declaró su admiración general por quienes ejercen la medicina con humanidad y dedicación y, especialmente, por los que se dedican a la atención de niños con enfermedades oncológicas.

Fernández-Teijeiro explicó, entre otros asuntos, que “el cáncer constituye la segunda causa de muerte en niños y la primera por enfermedad, y apenas supone el 2% de los casos de cáncer”, que se registran. “Los tumores malignos más frecuentes en los niños menores de 14 años según su localización son: leucemia (30%), tumores del sistema nervioso central (SNC) (20%), linfomas (15%) y tumores de cresta neural (10%)”, precisó.

Además, desarrolló los retos que la SEHOP afronta en la actualidad y para los próximos años de cara a mejorar la supervivencia de los niños y adolescentes con cáncer, que concretó en seis: mejorar el diagnóstico precoz mediante la divulgación de guías y actividades de formación continuada para los pediatras de primaria; atención a los adolescentes en unidades/camas diferenciadas, que posibiliten la atención transversal, compartida, entre los especialistas pediátricos y de adultos; establecimiento de redes entre hospitales que permitan el acceso a los ensayos clínicos fase III; creación y desarrollo de las unidades de referencia acreditadas por el Ministerio de Sanidad para tumores y procedimientos de especial complejidad; mejorar el acceso a ensayos clínicos fase I-II y desarrollo del “pasaporte del superviviente” telemático.