La Asociación cambia su visión benéfica y proteccionista por un concepto mutualista, cultural y de esparcimiento en el año 1934

Los mosenses se organizan en el año 1918

El primer acto fundacional de la institución fue la constitución de una comisión organizadora que ejerció diferentes funciones durante los primeros 90 días. De esta manera, el 25 de mayo de 1918, en el local de la calle Belgrano 865; 65 de los 100 socios ya registrados, conformaron la Asamblea Constituyente que aprobó los estatutos y eligió a la primera Comisión Directiva, que tomó posesión de su cargo el día 1 de junio del mismo año.

Los mosenses se organizan en el año 1918
E3.Comisión Fundadora Mos
Miembros de la comisión fundadora de la Asociación en 1918.

El primer acto fundacional de la institución fue la constitución de una comisión organizadora que ejerció diferentes funciones durante los primeros 90 días. De esta manera, el 25 de mayo de 1918, en el local de la calle Belgrano 865; 65 de los 100 socios ya registrados, conformaron la Asamblea Constituyente que aprobó los estatutos y eligió a la primera Comisión Directiva, que tomó posesión de su cargo el día 1 de junio del mismo año.

Esta institución nació con el objeto primordial de bregar por la educación de los niños y niñas gallegas, construyendo y pagando luego el mantenimiento y a los docentes que llevarían adelante dicha tarea. Los mosenses de Buenos Aires logran cumplir con ese viejo anhelo apenas comenzada la década del 30 cuando se inauguran y ponen en funcionamiento la Escuela de Coto do Torrón.

En el año 1934, se reforman los estatutos institucionales por lo que la Sociedad cambia su nombre por el de Asociación Residentes de Mos, sin embargo sus fines, al igual que los tiempos, también han cambiado. Si durante su primer período la institución había orientado su esfuerzo hacia la protección, la beneficencia y la educación; en esta nueva etapa trabajaría a favor del mutualismo, la cultura y el esparcimiento. Sus objetivos expresos apuntarían a partir de entonces a fomentar la cultura entre los asociados y sus familiares; a la ayuda mutua y a la organización de fiestas, excursiones y actos que brinden una fuente de sano esparcimiento a los asociados. 

El sueño de la Casa propia

La Asociación siempre soñó con tener una casa propia, pero hasta que esa meta se alcanzó, su secretaría funcionó en diversos puntos de la Capital Federal de Buenos Aires.

La primera ubicación fue en la calle Alsina 755, posteriormente se trasladó a la calle Salta 572 donde permaneció por muchos años hasta que finalmente en el 29 de diciembre de 1943, bajo la presidencia de José Dávila, se adquiere la propiedad de la calle Humberto 1 primero 3051. Y en el año 1951, durante la presidencia de Adolfo Sío, se compró el recreo de Las Barrancas de San Isidro.

La Asociación Residentes de Mos de Mutualidad, Cultura y Recreo está inscrita en el Registro Nacional de Mutualidades, con fecha 16 de octubre de 1946, bajo el número 105.

Memoria del primer ejercicio

En la memoria del primer ejercicio se asienta que en la sesión celebrada el 21 de diciembre de 1918, se resolvió otorgar el título de primer socio honorario a Antonio Ruzo, como prueba de agradecimiento por su labor desplegada en bien de la Sociedad al haber ayudado a realizar repatriaciones aún cuando la sociedad no acababa de organizarse. 

Las repatriaciones fueron una de las actividades que realizó la Sociedad en los casos en los que el solicitante no estuviera en condiciones de ganarse la vida por sí mismo. Tal fue el caso del socio Manuel Lago, quien el 24 de septiembre de 1918, solicitó la repatriación por encontrarse enfermo e imposibilitado para trabajar. La Sociedad nombró una comisión que verificara la veracidad de lo expuesto y por consejo del Dr. Barrios, se procedió a su repatriación, que se llevó a cabo costeada por fondos sociales.

Otra de las actividades que se llevaron a cabo con el propósito de promocionar la institución y de propiciar que convecinos y socios se acerquen a la misma fue la realización del primer festival y del baile familiar que se realizó el 7 de diciembre de 1918, superando exitosamente las expectativas que se habían abrigado.

El 9 de enero de 1919, la Comisión Directiva, nombró primer socio protector de la sociedad a don Antonio Rivero, por haber tenido la gentileza de anotarse con $2 mensuales. Allí consta además que la Junta Directiva le expresó su agradecimiento por su “altruista desprendimiento”.

La institución que nació con 112 socios, el día 1 de junio de 1918, pudo cerrar su primer ejercicio al año siguiente 199 socios de los cuales 61 pertenecían a Tameiga, 48 a Petelos, 30 a Cela, 22 a Sanguiñeda, 10 a Pereiras, 3 a Mos, 4 a Torroso, 2 a Dornelas, 2 Louredo y 17 a varios.