La mayor parte está en Buenos Aires, pero también los hay en el interior del país

Al menos una docena de gallegos han quedado varados en Argentina tras los cierres de fronteras

Al menos una docena de gallegos han quedado varados en Argentina, como consecuencia de las medidas dispuestas para contener la pandemia del Covid-19. La mayor parte está en la ciudad de Buenos Aires, pero también los hay que quedaron varados en el interior del país. La expectativa que tienen todos ellos es que puedan abordar un vuelo que los repatríe los primeros días de abril.

Al menos una docena de gallegos han quedado varados en Argentina tras los cierres de fronteras

Al menos una docena de gallegos han quedado varados en Argentina, como consecuencia de las medidas dispuestas para contener la pandemia del Covid-19. La mayor parte está en la ciudad de Buenos Aires, pero también los hay que quedaron varados en el interior del país. La expectativa que tienen todos ellos es que puedan abordar un vuelo que los repatríe los primeros días de abril.

Los consulados generales de España en Buenos Aires y en Rosario son los que están llevando a cabo las gestiones de coordinación para posibilitar su regreso.

La delegación del Gobierno gallego en Argentina, que está en contacto con ellos, también está colaborando y contribuyendo en las gestiones que llevan adelante dichos consulados.

Varados en Rosario

A dos vecinos de O Grove y una de Poio (Pontevedra), de vacaciones en Argentina, los pilló la cuarentena y quedaron varados en la ciudad de Rosario (Santa Fe), tras los cierres de fronteras dispuestos por los gobiernos de Argentina y España, en un esfuerzo por contener la propagación del Covid-19.

Antonio Puentes y María del Pilar Rivera, de O Grove, y Lina Bernárdez, de Poio, aguardan que en breve un avión los repatríe.

Rivera expresó en declaraciones a los medios de comunicación que están “esperanzados” en poder regresar pronto a España porque, según indicó, el Consulado de España en Rosario les informó que “en los próximos días” llegarán “dos vuelos” para repatriarlos.

Los tres llegaron a la Argentina el pasado 7 de marzo y su intención era regresar en un vuelo previsto para hace unos días que se canceló.