Francisco Lores deja huérfana a la Federación de Asociaciones Gallegas en Argentina

Consecuente con la lucha a favor de los derechos humanos, la libertad, la democracia y el pluralismo de ideas, la enfermedad se llevó para siempre el pasado mes de septiembre a Francisco Lores, presidente de la Federación de Asociaciones Gallegas de la Argentina y del Museo de la Emigración Gallega en la Argentina. 

Contaba 83 años de edad y una larga trayectoria en defensa de derechos de los gallegos en el exterior con los que siempre se mantuvo vinculado, principamente con los residentes en Argentina.

Oriundo del municipio costero de O Grove, en la provincia de Pontevedra, siendo joven se trasladó a Buenos Aires donde fue un asiduo de la Federación de Sociedades Gallegas y donde comenzó a tomarle gusto a la defensa de los derechos de los emigrantes.

Para la posteridad quedan sus peticiones al rey Juan Carlos y al expresidente González durante la V Cumbre Iberoameriana de Jefes de Estado y de Gobierno que se desarrolló en la ciudad de Bariloche, en 1995. Al monarca le alertó de la actitud de las empresas españolas en Argentina, que había llevado a los empresarios españoles a granjearse el insulto de ‘gallegos ladrones’ y al presidente, de la cruda realidad por la que atravesaban muchos de los españoles que vivían en el país austral.

El director general de Migraciones, Ildefonso de la Campa, que lo consideró como “un amigo”, lamentó la “pérdida de un referente de la emigración” como fue Lores y recordó la relación impecable que este referente de la colectividad gallega en Argentina mantuvo con las administraciones central y autonómica, así como el apoyo de su departamento con el proyecto del Museo de la Emigración Gallega.

Por su parte, el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, destacó su papel protagonista “en el mantenimiento y divulgación de la cultura gallega en Argentina” y la “honda huella que dejó en el recuerdo de todos los gallegos, especialmente de los que residen en Argentina”.

Producto de su gestión al frente de la Federación, en 2005 se creó el Museo de la Emigración y más tarde, la Biblioteca Galega de Bos Aires ‘Antonio Pérez Prado’, donde hoy en día los investigadores buscan información sobre la emigración, la causa republicana y la Guerra Civil Española.