Susana Clerici: “Me interesa dejar claro que no hay un pensamiento único en Cataluña”

La secretaria de Inmigración y responsable del voto exterior del Partido Popular Catalán (PPC), Susana Clerici, viajó a la Argentina para reunirse con la dirigencia local de su partido y entrevistarse con directivos del Casal de Cataluña en Buenos Aires.

Durante su visita, la política, de origen argentino, se interiorizó sobre la situación del colectivo en el país, donde residen 23.500 catalanes con derecho a voto –de los 193 mil que figuran en el Censo de Residentes Ausentes (CERA)–, y compartió puntos de vista sobre el panorama político y económico que atraviesa la Comunidad Autónoma en el marco del proceso separatista encarado por el presidente, Artur Mas, y de cara a los comicios regionales del próximo 27 de septiembre. 

Pregunta. ¿Cómo ve a Cataluña en el marco del proceso separatista iniciado por el presidente Artur Mas?

Respuesta. En Cataluña estamos viviendo un momento muy especial, un proceso que me produce una gran tristeza. Yo hace 25 años que vivo en la Comunidad y nunca me había tocado vivir en un clima de tanta crispación como el que hay desde que Artur Mas intenta gobernar, y digo intenta porque la verdad es que gobierna poco porque nos la estamos pasando de elección en elección.

P. ¿Cómo se ha reflejado esta circunstancia en la sociedad?

R. Veo con mucha tristeza que Artur Mas nos haya dividido entre los buenos catalanes y los malos catalanes, teniendo en cuenta que los malos somos los que nos sentimos catalanes y españoles a la vez.

La sociedad está muy dividida, está enfrentada, ya no puedes hablar libremente. Los que nos sentimos españoles y catalanes pasamos a ser malos catalanes y nos tachan de fachas o de franquistas y si pones una bandera española en tu casa para celebrar una fecha patria corres el riesgo de que te apedreen la ventana.

Por otra parte, veo que el incumplimiento de la ley es continuo, tampoco cumplen los dictámenes de tribunal superior, y eso es preocupante.

P. Durante su paso por la ciudad de Buenos Aires, usted visitó el Casal de Cataluña y se entrevistó con directivos de la institución. ¿Cuál fue el contenido de esta reunión?

R. Me interesa dejar claro que no hay un pensamiento único en Cataluña. Se quiere vender que todos somos independentistas y se dice que “queremos decidir” en un planteo tramposo o porque nosotros decidimos cada vez que vamos a votar.

P. También re reunió con la dirigencia local de su partido. ¿Cómo fue ese encuentro?

R. Con los militantes del partido valoramos la situación de los españoles en el exterior y de los catalanes en Buenos Aires. Conversamos sobre la problemática que tienen en este momento y su preocupación por el voto en el exterior y el reconocimiento de la nacionalidad para todos los nietos de emigrantes.

Llevo una buena mochila de demandas y preocupaciones sobre temas que son muy importantes para los que están aquí.

P. ¿Cuáles son las propuestas de su partido para los inmigrantes en la Comunidad?

R. El PP ha trabajado por una inmigración legal y ordenada, una inmigración que trabaje y se integre cumpliendo con los derechos y obligaciones que tenemos todos.

Yo veo mucha hipocresía en la izquierda, al acusar al PP de no querer una determinada inmigración y la verdad es que el PP no está en contra de colectivos sino de personas que delinquen. Esto es fácil de politizar y manipular.

El PP no tiene problema con una inmigración que esté integrada en valores, que sea legal y que vaya a construir.

P. ¿Cuál es la situación de los inmigrantes allí?

R. La inmigración legal ha disminuido porque muchos inmigrantes regresaron a sus países de origen: la población se ha reducido en 69 mil personas en el año 2013 y 14.

Pero aquí tenemos que constatar que en Cataluña ha habido más de 74 mil nacionalizaciones desde 2013 hasta ahora, con lo cual eso también incide en el censo de inmigrantes.

De los 73.400 nacionalizaciones en Cataluña, 46.000 aproximadamente han sido de origen latinoamericano.

En Cataluña tenemos un plus añadido que es la lengua, porque el colectivo latinoamericano que se expresa en su lengua madre, que es el castellano, no es del interés de los nacionalistas que prefieren promocionar otros colectivos que no hablan español porque la inmersión lingüística sería total.

P. Cataluña está recibiendo inmigrantes por el sistema de reparto que ha establecido la Unión Europea para los países miembro. ¿Cómo está funcionando?

R. A Cataluña llegan los inmigrantes por el tema del reparto que se hace de la gente que llega o saltando la valla en Ceuta o a través de las costas. Nosotros como PP hemos exigido a la comunidad europea una política seria de inmigración porque no podemos seguir recibiendo gente si no sabemos qué hacer con ellos.

Cada país debería acoger el número de inmigrantes que puede porque esto es como una casa si puedes darle de comer a 100 personas y recibes 300, qué haces con las otras 200.

El problema también son las mafias que trafican con personas a las que engañan y les hacen creer que Europa es una maravilla.

P. Usted se radicó en Calatuña hace ya más de 25 años. ¿Cómo ha sido su experiencia?

R. Yo siempre digo que no es fácil ser un inmigrante, no es fácil dejar tu país de origen, tu familia,  tus afectos y llegar a un lugar donde nadie te conoce para empezar de nuevo. A veces desde aquí esto no se entiende demasiado. Los que hemos logrado adaptarnos, integrarnos, construir, seguir trabajando en un país que crece como comienza nuevamente a hacerlo España. El tema de los afectos es muy difícil, porque uno tiene el corazón partido.

En Cataluña me han recodado muchas veces que era de ahí. Me he sentido muchas veces maltratada, sobre todo por los nacionalistas, pero en este momento llegamos ya a la paranoia de clasificar a los catalanes de primera y de segunda para los que somos catalanistas y españolistas.

He notado que aquí la gente tiene la impresión de que en otros sitios siempre se vive mejor, y la verdad es que a veces sí y a veces no, pero hay que pensar que si es difícil trabajar en Argentina siendo argentino, lo que es trabajar en otro país siendo argentino y sin que nadie te conozca.