Natural de Vigo, Bilbatúa emigró a México siendo niño a raíz del estallido de la Guerra Civil

El presidente Peña Nieto premió al documentalista hispano-mexicano Demetrio Bilbatúa

El cineasta y documentalista hispano-mexicano Demetrio Bilbatúa Rodríguez recibió recientemente de manos del presidente de México, Enrique Peña Nieto, el Premio Nacional de la Comunicación 2015, que concede el Consejo de Comunicación para reconocer los méritos y aportaciones de un mexicano que haya contribuido a través de los medios de comunicación, a la promoción y el mejoramiento de la comunidad y al desarrollo de México.

El presidente Peña Nieto premió al documentalista hispano-mexicano Demetrio Bilbatúa
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Un momento de la intervención de Bilbatúa.

El cineasta y documentalista hispano-mexicano Demetrio Bilbatúa Rodríguez recibió recientemente de manos del presidente de México, Enrique Peña Nieto, el Premio Nacional de la Comunicación 2015, que concede el Consejo de Comunicación para reconocer los méritos y aportaciones de un mexicano que haya contribuido a través de los medios de comunicación, a la promoción y el mejoramiento de la comunidad y al desarrollo de México.

Natural de Vigo (Galicia) (1935), Bilbatúa emigró a México siendo niño a raíz del estallido de la Guerra Civil española y desde joven, junto a su hermano Ángel, herederos de tres generaciones de fotógrafos, se dedicaron a la filmación con el apoyo de Gabriel Figueroa.

Adoptó la nacionalidad mexicana en 1970 y tras más de 50 años de experiencia fue merecedor de este galardón por su trayectoria como fotógrafo documentalista e impulsor en México del documental cinematográfico.

Recopiló una parte importante de la historia y cultura de México, dando a conocer su arte, tradiciones, paisajes y belleza, así como aspectos del desarrollo y el paso por la modernidad de México.

Su invaluable aportación a la cultura cinematográfica consta de más de mil obras fílmicas, como los grandes documentales que realizó de la visita a México de los presidentes de Estados Unidos, John F. Kennedy, y de Francia, Charles De Gaulle, así como el documental ‘México el Último País Mágico’, escrito por Carlos Montemayor.

A lo largo de su trayectoria ha recibido diversos reconocimientos nacionales e internacionales, entre ellos, el Diploma de Honor como miembro distinguido de la Asociación Nacional de la Publicidad (1984) y el Premio Bravo, otorgado por la Asociación Rafael Banquells A.C. por el documental ‘Grupo Modelo’ (2000).

También fue fundador del Centro Cultural Cinematográfico Hermanos Bilbatúa.

El pasado mes de abril, Bilbatúa entregó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) más de mil documentales, que retratan la vida de México durante la segunda mitad del siglo XX. Se trata de material filmado en 35 milímetros, del Archivo Visual Bilbatúa, el cual deberá ser totalmente digitalizado, labor que se deberá emprender para garantizar su conservación.

El documentalista enfatizó que, a sus 80 años de edad y luego de 60 de haber recorrido la nación, decidió entregar su acervo a un país que dio refugio a las familias de los exiliados españoles durante la Guerra Civil Española.

Alejando Grisi, nuevo presidente del Consejo de la Comunicación, felicitó a Demetrio Bilbatúa Rodríguez por el merecido reconocimiento, por promover las grandes campañas sociales y por dar a conocer la grandeza del país.

La escultura del Premio Nacional de la Comunicación fue realizada por Celia Sittón, reconocida escultora mexicana ganadora de la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Florencia, Italia.

En años anteriores, este galardón recayó en Joaquín Vargas, Jacobo Zabludovsky, Francisco Ibarra López, Lorenzo Servitje, Don Emilio Azcárraga Milmo (postmortem), Eulalio Ferrer y Miguel Sabido.