Pedro Sánchez califica el voto rogado de “tragedia democrática” y aboga en el debate de investidura por su reforma
Los problemas que suscita el voto rogado quedaron en evidencia una vez más este lunes en el Congreso de los Diputados en el transcurso del debate de investidura. El candidato a presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, aludió en su discurso a esta modalidad de voto y la calificó de “tragedia democrática”, al propiciar una rebaja más que considerable en la participación de los residentes en el exterior en las citas electorales que se celebran en España desde la entrada en vigor de la reforma de la Loreg, en el año 2011.
El voto rogado es una “tragedia democrática” que debe reformarse para permitir que los residentes en el exterior puedan ejercer su derecho al sufragio, dijo Sánchez, quien, durante los nueve meses que permaneció al frente del ejecutivo, tras la moción de censura, se comprometió en más de una ocasión a modificar la normativa al respecto para que los españoles con derecho a voto que residen en el extranjero tengan las mismas facilidades para votar que los que están asentados en el territorio.
Sin embargo, fueron los plazos, tras la convocatoria de nuevas elecciones, lo que impidió aprobar en la Cámara por vía de urgencia la proposición de ley presentada el pasado mes de febrero por los grupos Socialista y Confederal de Unidos Podemos para suprimir el voto rogado. Todos los grupos del Congreso aprobaron el 27 de febrero admitir a trámite la proposición de ley de PSOE y Unidos Podemos para eliminar el voto rogado, pero la iniciativa quedó sin recorrido legislativo por falta de tiempo.
“Un ciudadano español lo es independientemente de donde resida”, recordó Sánchez este lunes en el hemiciclo, por lo que es “intolerable” que apenas seis de cada cien electores en el exterior pudiesen votar el 28 de abril, dijo el candidato, en alusión concreta a los últimos comicios generales celebrados en España. La cifra de participación en esa convocatoria fue similar a las que se vienen dando en las distintas citas con las urnas celebradas en el país desde el año 2011, debido a los problemas técnicos para hacer efectivo el sufragio desde el exterior.
