La oposición expone ante el ministro Margallo sus quejas por la Estrategia de Acción Exterior

La Estrategia de Acción Exterior que ha elaborado el Gobierno con la intención de servir de guía a la política exterior de España no convence a la oposición, que ha expresado sus críticas en la presentación del documento este pasado martes en el Congreso de los Diputados, realizada por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.

La oposición expone ante el ministro Margallo sus quejas por la Estrategia de Acción Exterior
Margallo en el Congreso
Un momento de la comparecencia de García-Margallo.

La Estrategia de Acción Exterior que ha elaborado el Gobierno con la intención de servir de guía a la política exterior de España no convence a la oposición, que ha expresado sus críticas en la presentación del documento este pasado martes en el Congreso de los Diputados, realizada por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.

Con la única excepción de UPN, que ha calificado de “coherente” el texto, PSOE, IU, CiU y PNV han puesto pegas al contenido del texto pero también a las formas, pues, en su opinión, la Estrategia no se ha elaborado buscando el consenso previo con los grupos parlamentarios y las comunidades autónomas, según informó Europa Press. No obstante, PSOE, IU y CiU han compartido la apuesta que el documento hace por una Europa “federal”.

José Manuel García-Margallo ha sido el encargado de defender el texto ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso. Un documento necesario, ha dicho, desde el momento en que España, con la entrada en el euro, culminó el proceso de “reencuentro con el mundo y con Europa” que había caracterizado la política exterior española desde la Transición.

Para el PSOE, la Estrategia, de casi 200 páginas de extensión, presenta “demasiada historia y poco futuro”, pues apenas fija posición en asuntos centrales de política internacional, ha advertido la portavoz de Exteriores, Trinidad Jiménez, que echa en falta en el texto una definición de cómo España quiere presentarse ante el mundo. Los socialistas tampoco respaldan el enfoque “excesivamente economicista” que, en su opinión, impregna todo el texto, ha indicado Jiménez.

En representación de IU, Joan Josep Nuet ve en la Estrategia un “marcado sesgo conservador” y ha denunciado que el texto hace un análisis “equivocado” de la crisis económica por la que atraviesan Europa y España, al tiempo que apuesta por una “Europa federal neoliberal”, extremo que ha rechazado el ministro.

Desde CiU, el diputado Jordi Xuclà ha llamado la atención con respecto al hecho de que la apuesta por el “pleno respeto de los Derechos Humanos” que hace la Estrategia “choca de lleno” con el proyecto de ley de Seguridad Ciudadana impulsado por el Gobierno y con las “devoluciones en caliente” de inmigrantes a Marruecos.

Xuclà ha revelado también que la Generalitat catalana no ha hecho aportaciones a la Estrategia debido al rechazo del Gobierno a suscribir un memorándum de entendimiento con la Generalitat en materia de acción exterior. El diputado de CIU se ha quejado asimismo de que el documento no haga referencia alguna al carácter “plurilingüístico y pluricultural” de España.

Para el PNV, la Estrategia es un documento “muy generalista y redundante”, si bien precisamente por eso a su grupo no le preocupa en exceso, ha dicho el portavoz, Aitor Esteban, que ha afeado al ministro no haber preguntado a las comunidades autónomas por su acción exterior antes de entregarles un texto acabado, pues en su opinión, la acción exterior de las autonomías puede “complementar” la del Estado.

En su turno de réplica, el ministro ha puesto en valor la “visión muy clara” que aporta la Estrategia sobre hacia dónde quiere España que camine la UE, a diferencia, ha dicho, de la falta de claridad que en este mismo punto percibe en el PSOE, que con su denuncia del pacto de fiscalidad europeo ha causado “perplejidad”.

No obstante, el ministro ha animado a los grupos a que presenten aportaciones concretas al texto para que el Gobierno valore si las añade al documento.