Marea Granate defiende en el Parlamento catalán la descarga de la documentación electoral por internet

La plataforma Marea Granate rechazó en el Parlamento de Cataluña la implantación del voto por internet y defendió un sistema de descarga de la documentación electoral por vía telemática que, al igual que el voto por internet, suprimiría la dificultad del plazo de envío de documentación por correo postal.

Berta Burguete, representante de Marea Granate, explicó su posicionamiento en la Comisión Institucional del Parlamento de Cataluña en la que se debatía el anteproyecto de ley electoral para los catalanes en el exterior. En el comunicado hecho público desde la plataforma, se lamentaban de que sólo estuvieran presentes en la intervención los representantes de PSC, SíQueEsPot y JxSí, estando ausentes todos los demás grupos políticos.

Los principales motivos que ofrecieron para rechazar la implantación del voto electrónico son la falta de seguridad e integridad del voto por internet y la pérdida de control del sistema electoral por parte de la ciudadanía.

Respecto a la ausencia de seguridad, Marea Granate asegura que en numerosas ocasiones se ha puesto en evidencia el voto por internet y recuerdan que países como Noruega o Canadá hayan desistido de su uso.

También aseguran que si se impone el modelo de voto electrónico el control del sistema electoral pasaría a estar en manos de empresas privadas y la ciudadanía perdería el control “sobre aspectos fundamentales del proceso del voto, como el recuento, la auditoría y fiscalización”. Según explican desde esta plataforma, estos motivos ya han sido suficientes para que Alemania haya declarado inconstitucionales estos métodos de votación.

Debate a puerta cerrada

Marea Granate mostró su preocupación por que el debate se produjera a puerta cerrada y “sin posibilidad de seguimiento por los ciudadanos”. Además, mostraron su disgusto porque no se hubiese invitado a expertos independientes en criptografía mientras sí que acudieron representantes de empresas privadas, como Scytl, que tienen un importante conflicto de intereses respecto a la implantación del voto por internet.