Defendió el papel de los Consejos como defensores del pueblo en el exterior

Joaquim Rabella, expresidente del CRE de Nicaragua, recibió la Medalla de Honor de la Emigración

Joaquim Rabella Vives, expresidente del Consejo de Residentes Españoles (CRE) de Nicaragua, recibió el pasado mes de noviembre la Medalla de Honor de la Emigración, que otorga el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, por sus servicios a la colectividad.

Joaquim Rabella, expresidente del CRE de Nicaragua, recibió la Medalla de Honor de la Emigración
CRE Nicaragua
Joaquim Rabella, en un momento de su intervención.

Joaquim Rabella Vives, expresidente del Consejo de Residentes Españoles (CRE) de Nicaragua, recibió el pasado mes de noviembre la Medalla de Honor de la Emigración, que otorga el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, por sus servicios a la colectividad.

Durante el acto de entrega de la condecoración civil, que se llevó a cabo en la residencia del embajador de España, el que fue durante ocho años presidente del Consejo de Residentes de Nicaragua manifestó que “uno de los aspectos más interesantes del trabajo de los CRE, además de informar a la comunidad y contestar consultas, es el de actuar como defensores del pueblo en el exterior, es decir, trabajar en defensa de los residentes en el exterior frente a la Administración”.

Asimismo, Rabella dijo que por encima de los gobiernos y las posiciones políticas personales está “el factor humano: la convivencia, la solidaridad, la amistad, la hermandad, las complicidades que siempre ha habido entre todos los pueblos del Estado español, de tanto tiempo de vivir juntos, de atravesar juntos la historia”.

Finalmente, el galardonado expresó su deseo de “compartir” su condecoración con “las personas y asociaciones solidarias”, “incluso ayuntamientos que están luchando para apoyar” en España y Europa “a los centenares de miles de desplazados y desplazadas del norte de África y de Oriente Medio, buscándoles un hogar digno y un trabajo digno, hasta que puedan regresar a sus países, que ellos nunca hubieran querido abandonar”.