El Defensor del Pueblo pide información al Gobierno tras varias quejas sobre la situación de presos en el extranjero

El Defensor del Pueblo ha recibido varias quejas relativas a la situación de los presos españoles en el extranjero en el marco de la pandemia del Covid-19 y se ha dirigido a la Administración para interesarse por la atención consular que están recibiendo.

Según fuentes de la institución consultadas por Europa Press, al Defensor, Francisco Fernández Marugán, le han llegado informaciones sobre casos concretos de presos españoles en Brasil, Ecuador, Italia, India, Marruecos y Bulgaria.

El Defensor del Pueblo siempre está muy volcado en la atención de los presos españoles en el exterior y ahora está especialmente preocupado ya que en muchas cárceles extranjeras se han producido motines y en otras no están llegando los productos de alimentación y aseo. Así, entiende que la atención consular puede verse dificultada, pero considera que debe garantizarse la atención a los presos.

La atención consular está en manos de los funcionarios consulares, que dependen a su vez el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación.

Fuentes de este Departamento consultadas por Europa Press aseguran que los detenidos siguen estando atendidos por las representaciones consulares, pero que las restricciones adoptadas por los países hacen más complicados los desplazamientos para hacer visitas. En todo caso, afirman que la “protección y asistencia debidas” siguen “ejerciéndose de manera diligente”.

Casi 1.000 españoles presos en el extranjero

Según datos de la Dirección General de Españoles en el Exterior y de Asuntos Consulares, con fecha del pasado 28 de febrero, constan un total de 971 ciudadanos españoles detenidos en el extranjero, de los que 540 están cumpliendo condena.

Las cifras, desveladas por el Gobierno en una reciente respuesta parlamentaria precisan que del total de detenidos, 593 lo son por tráfico de drogas y 378 por otros motivos. Un total de 864 detenidos son varones y 107 son mujeres.

La atención a los presos españoles en el extranjero en el marco de la pandemia fue uno de los asuntos abordados durante un debate telemático organizado por la Escuela Diplomática. En él, el embajador español en China, Rafael Dezcallar, relató que se ha seguido aplicando la normativa habitual.

En su caso concreto, relató que hubo "especial vigilancia para que en el momento peor de la epidemia en China" los presos españoles "estuvieran en situaciones para que su salud estuviera bien defendida" y se les aplicasen las medidas de distanciamiento y atención a la salud que estaba aplicando China en sus prisiones. Según dijo, no ha habido ningún problema especial con ninguno.