La Cooperación española contribuye a recuperar el esplendor de iglesias coloniales en Honduras

Las hermosas iglesias coloniales que conservan cinco comunidades del departamento de Lempira, en el occidente de Honduras, están recobrando todo su esplendor con un proyecto de restauración emprendido por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

Las iglesias se localizan en la colonial Ciudad de Gracias, cabecera departamental de Lempira; Belén, San Marcos Caiquín, San Manuel de Colohete y San Sebastián, que conforman la Mancomunidad de Colosuca.

La Colosuca, vocablo indígena lenca que significa “ave de bello plumaje, tierra de ricos maizales, mujeres bellas y hombres trabajadores”, según apuntes históricos, nació hacia el año 2000 y desde entonces ha tenido el apoyo de la Cooperación Española, dijo a Efe el gerente de la Mancomunidad, Roni Hernán Mejía.

Entre las iglesias más hermosas de la Mancomunidad Colosuca figuran las de Gracias (dos), San Manuel de Colohete, San Sebastián y La Campa, este último un pueblo de alfareras lencas cuyas obras de barro son conocidas dentro y fuera del país.

El jefe de la Unidad de Control Urbano de la Mancomunidad, José Eduardo Álvarez, dijo que los pueblos de Colosuca conservan un patrimonio que se originó entre los años 1500 y finales del siglo XIX, y que con la Cooperación Española se creó la Oficina de los Conjuntos Históricos que se ha enfocado en el patrimonio tangible.

Así se dio inicio a la restauración de templos, porque son edificios clave, iconos de cada municipio, y aunque no sea solo desde el punto religioso, hay que volverles a dar vida y el valor cultural que tienen, inclusive se han vuelto centros de interés turístico, indicó Álvarez a Efe.

El imponente templo de San Manuel de Colohete, con una arquitectura tipo barroco, rica ornamentación, finos detalles en su fachada e interior, fue construido entre los años 1600 y 1700 y es para muchos conocedores uno de los más hermosos en América.

Para el embajador de España en Honduras, Miguel Albero, la iglesia de San Manuel de Colohete “es una maravilla que hay que potenciar y cuidar a la vez”.

“La primera vez que vi San Manuel de Colohete me pareció una de las iglesias más bonitas que he visto en el mundo, esa idea pequeña de madera policromada es una preciosidad, creo que todo el mundo tiene que verla”, indicó a Efe el diplomático español.

A futuro, el embajador Albero se imagina una semana de música virreinal y religiosa en el circuito de las iglesias coloniales y que la gente venga a quedarse a Gracias.

Promoción turística

El proyecto de restauración y conservación patrimonial que impulsa la AECID incluye la promoción turística para que nacionales y foráneos visiten los pintorescos municipios, que atesoran auténticas joyas del patrimonio cultural de Honduras.

El responsable del proyecto de la AECID en Gracias, José Luis Cárdenas, explicó que desde que nació la Colosuca, “basándonos en los recursos, en las riquezas que ya apuntaba este territorio, se empezaron a desarrollar algunos proyectos sectoriales”.

“Lo importante, en mi opinión, es la integralidad que ha tenido toda la intervención de la Cooperación Española en este territorio, en el que también la AECID ha venido brindado asistencia en materia de gobernanza, fortalecimiento municipal, agua y saneamiento”, entre otros proyectos, agregó.

Entre las iglesias más representativas de la Ciudad de Gracias figuran las de San Marcos y La Merced, otras dos joyas de las que sus habitantes se sienten orgullosos e invitan a venir al departamento de Lempira, nombre de un cacique, el primer héroe nacional, quien murió luchando contra los conquistadores españoles.

La AECID también promueve en Gracias un proyecto turístico ambiental, el del Parque Nacional Celaque, uno de los principales pulmones de oxígeno que tiene el occidente de Honduras.

El director de la AECID en Tegucigalpa, Miguel González, recordó que el organismo español viene trabajando en el departamento de Lempira desde 2004 y que para España la Ciudad de Gracias “guarda mucho significado por toda su riqueza histórica y cultural”.

En Gracias, el trabajo de la AECID se ha centrado mucho en apostar por todo el patrimonio histórico y cultural, comenzando por un plan maestro de protección del centro histórico, lo que ha contribuido al desarrollo que ha tenido la ciudad en los últimos años, añadió.