PLANTEAN UN SIMPOSIO SOBRE NACIONALIDAD “PORQUE ESTAMOS EN LA INVISIBILIDAD”

La Comisión de Derechos Civiles del CGCEE aprobó una propuesta para modificar el acceso a la nacionalidad

La Comisión de Derechos Civiles y Participación del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) aprobó el pasado mes de marzo el documento para instar al Gobierno a llevar a cabo una serie de modificaciones del Código Civil en cuanto al acceso a la nacionalidad y corregir de esta manera las limitaciones que se produjeron con la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica.

La Comisión de Derechos Civiles del CGCEE aprobó una propuesta para modificar el acceso a la nacionalidad

La Comisión de Derechos Civiles y Participación del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) aprobó el pasado mes de marzo el documento para instar al Gobierno a llevar a cabo una serie de modificaciones del Código Civil en cuanto al acceso a la nacionalidad y corregir de esta manera las limitaciones que se produjeron con la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica.

Este documento fue elaborado por la Subcomisión de Nacionalidad que se reunió en Madrid los pasados 23 y 24 de marzo. Una vez consensuado, el texto fue enviado por correo electrónico a los consejeros, que también emitieron su voto por este sistema y aprobaron la propuesta con un total de 16 votos a favor y una abstención. Dada la urgencia del tema, están valorando la posibilidad de utilizar la vía telemática para hacer una consulta al Pleno y así no tener que esperar a finales de septiembre o principios de octubre que se reúna el Pleno.

“Nosotros esperamos que el Congreso de los Diputados despierte y se aprueben las modificaciones por vía de urgencia”, asegura el presidente de la Comisión y coordinador de la Subcomisión, Ángel Capellán, quien explica que, “aún siendo año electoral, si se tocan las teclas adecuadas es posible”.

Según recuerda Capellán, con la Ley de la Memoria Histórica se dio acceso a la nacionalidad a un colectivo muy importante pero al ser una opción válida solo entre 2008 y 2011, muchas personas se quedaron fuera. “Este es un colectivo grande y disperso y, aunque no hay cifras al respecto, tengo la impresión de que la gran mayoría de los residentes en el exterior no tienen ni idea”, asegura el presidente de la Comisión, que valora la Ley de Memoria Histórica “como justa porque a su amparo se hicieron 500.000 peticiones de adquisición, de los que un 10% fueron nietos, pero injusta”, ya que no tiene sentido “tener limitación de tiempo”.

En el documento aprobado por la Comisión se propone que el Código Civil recoja que pueden optar a la nacionalidad de origen los nacidos de madre española antes de la entrada en vigor de la Constitución, los hijos de quienes hayan obtenido la nacionalidad a través de la Ley de Memoria Histórica, los hijos mayores de edad de aquellos que hayan recuperado la nacionalidad española, los nacidos de padres o madres originariamente españoles y los nietos de las abuelas que no transmitieron la nacionalidad española.

Además, quieren que se especifique que aquellas personas que adquieran la nacionalidad por estos supuestos no tengan que renunciar a la que ya tienen.

En el documento también se pide la retirada del artículo 24 del Código Civil que recoge la pérdida de nacionalidad para los hijos de españoles no nacidos en España que a los tres años de la mayoría de edad o emancipación no hayan expresado su voluntad de conservarla ante el encargado del Registro Civil. Con la supresión de este artículo se evitaría que muchos españoles pierdan de manera involuntaria la nacionalidad, incluso, en algunos casos, adquirida recientemente.

Desde esta Comisión también se defiende que todos los que hayan tenido en algún momento nacionalidad española puedan recuperarla simplemente declarando su voluntad de hacerlo e inscribiéndola en el registro.

Una vez que el documento sea aprobado por el Pleno, la intención de los miembros es buscar el apoyo de los partidos políticos, grupos parlamentarios y los niveles más altos del Gobierno para que se haga la modificación por vía de urgencia.

El coordinador de la Subcomisión explica que estas propuestas intentan dar soluciones a problemas puntuales hasta que no se apruebe la Ley de Nacionalidad, una ley que espera que vea la luz “en un futuro próximo”, que sitúa en dos o tres años, y que debe recoger estos cambios.

Capellán recuerda que la tarea de la Subcomisión es hacer una propuesta. “Nosotros no legislamos ni escribimos una Ley de Nacionalidad”, sino que “investigamos todos los posibles ángulos de los ciudadanos del exterior” para luego transmitir al Gobierno y al Parlamento como debe ser la Ley de Nacionalidad.

Además de Ángel Capellán, forman parte de esta Subcomisión Eduardo Dizy Sánchez, presidente del Consejo General; Francisco Ruiz Vázquez, consejero por Suiza y anterior presidente del Consejo; y Carmen Pérez Poyón, consejera por Perú. También participan en calidad de expertos Luis Lamiel, que fue consejero general desde la fundación del mismo hasta el año 2011, y Aurelia Álvarez Rodríguez, profesora de Derecho en la Universidad de León, y experta en cuestiones de nacionalidad española y responsable de la web www.migracionconderechos.es

Simposio sobre nacionalidad

La Subcomisión también presentará a la Comisión una propuesta para llevar a cabo a finales de este año o principios del próximo un simposio sobre nacionalidad. Esta idea, explica Capellán, nació en la videoconferencia de preparación de la reunión y serviría para dar visibilidad al Consejo, “porque estamos en la invisibilidad”.

Por el momento, se está elaborando la propuesta “pero la idea –explica Capellán– es hacerlo en colaboración con una universidad, preferiblemente en la zona de Madrid y se invitaría a participar a expertos académicos, como la profesora Aurelia Álvarez; a expertos del Ministerio de Justicia; a expertos del Ministerio de Exteriores, para que expliquen qué pasa cuando se aprueba la ley y se va a aplicar; y a diputados interesados en temas de nacionalidad.

Pleno de tres días

Una de las propuestas que se va a debatir en la Comisión es que los plenos del Consejo vuelvan a ser de tres días para que no pase como en el último que se dejó para la segunda parte del segundo día los temas más importantes y al final, por falta de tiempo, hubo que votar la propuesta de reforma de los CRE en bloque “a toda prisa y de manera atropellada”.