Según explica José María Gómez-Valadés, consejero general por Bélgica

La colectividad española en Bélgica ve “con alarma y preocupación” los atentados sufridos en Bruselas

“Los atentados desorientan a cualquier ciudadano normal y esto no hay quien lo comprenda”, comenta José María Goméz-Valadés, consejero general de la Ciudadanía Española en el Exterior por Bélgica, quien explica que la colectividad española ve estos hechos “con alarma y preocupación” y que espera que “los que han cometido estos atentados sean juzgados y paguen por ello”.

La colectividad española en Bélgica ve “con alarma y preocupación” los atentados sufridos en Bruselas
Dos de Bélgica
José Mª Gómez-Valadés.

“Los atentados desorientan a cualquier ciudadano normal y esto no hay quien lo comprenda”, comenta José María Goméz-Valadés, consejero general de la Ciudadanía Española en el Exterior por Bélgica, quien explica que la colectividad española ve estos hechos “con alarma y preocupación” y que espera que “los que han cometido estos atentados sean juzgados y paguen por ello”.

Gómez-Valadés explica que el martes, día de los atentados, se dirigía a la ‘permanencia social’ que realiza en nombre del CRE, y que se enteró de los atentados cuando iba en el tren. Él decidió continuar con su actividad pero muchas personas no pudieron llegar porque el local donde atiende a los españoles, el bar ‘La Flor de Asturias’, está cerca de la estación de Maelbeek. A estas reuniones, en las que Gómez-Valadés informa sobre cómo hacer trámites en el Consulado, los viajes del Imserso, las fe de vida y las Aulas de Lengua y Cultura Española, entre otras, suelen ir unas 25 personas pero ayer martes “sólo acudieron 3 ó 4 españoles, aunque el bar se llenó porque desalojaron algunos de los edificios cercanos”.

Este consejero, que finalmente tuvo que volver a casa en taxi porque las estaciones estaban cerradas, se muestra preocupado por la radicalización que se está produciendo en los últimos años en los que “hay una confusión lamentable” entre terroristas y musulmanes.

En los últimos tiempos, explica Gómez-Valadés, cada vez más españoles se quejan de que “el Consulado de España está lleno de moros”, utilizando este sentido “peyorativo” para los españoles con ascendencia árabe. “Hay que estar atento a este tipo de manifestaciones irracionales” que no llevan a ningún sitio e intentar “encontrar una solución a esta dramática situación desde la serenidad”, asegura este consejero general, que también se muestra preocupado por la utilización que algunos partidos políticos hacen de los atentados y la radicalización que se está produciendo, no sólo en Bélgica, sino también en países como Holanda y Alemania.