Ana Pastor reivindicó en Buenos Aires los derechos a la nacionalidad de los nietos y al voto de los emigrantes

La presidenta del Congreso y cabeza de lista por Pontevedra, Ana Pastor, y la secretaria ejecutiva de Emigración del Partido Popular (PP) y primera en la lista por Ourense, Ana Belén Vázquez Blanco, participaron el sábado 30 en el mitin político que se realizó en la sede popular de Buenos Aires.

Allí, Pastor y Vázquez, que permanecieron apenas unas horas en la ciudad de Buenos Aires, se reunieron con medio centenar de afiliados y simpatizantes del PP, en el marco de una “intensa” gira preelectoral que continuó el domingo en Montevideo.

“Es igual de español el que vive en Buenos Aires que el que vive en Cuenca o en Pontevedra, no puedes decir que tiene derecho al voto y luego ponerle mil trabas", aseguró Pastor durante el mitin.
Arropadas por la conducción de la agrupación popular en Buenos Aires, que encabeza José Luis González, Pastor dijo que no existen más opciones para los próximos comicios que el actual presidente de España, Pedro Sánchez, o el candidato de su partido, Pablo Casado.
“Creemos que lo mejor para España es la apuesta por el PP, porque cuando gobierna no solo hay estabilidad política sino que se ha creado empleo, se ha creado riqueza, se ha mejorado la sostenibilidad del estado de bienestar y a todos nos ha ido mejor", sostuvo el sábado por la tarde.
El voto en exterior, la fallida ley de nacionalidad y las ayudas al retorno, que propuso Pedro Sáchez, fueron los  ejes principales del debate que mantuvieron con los afiliados en Buenos Aires.
Durante su intervención, además, Ana Pastor culpó al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) por las demoras en la aprobación de una normativa que da por finalizada la exigencia de rogar el voto para los españoles residentes en el exterior.

“Si se mantiene –apuntó­– es porque (al PSOE) no le “interesa que América pueda votar”. La número uno del partido en Pontevedra, también se refirió al compromiso de su partido con los nietos descendientes de españoles en otros países, y asuró que es “necesario” reformar la Ley de Nacionalidad española.
“No puede ser –dijo– que en una familia de descendientes de españoles, dos nietos tengan la nacionalidad y un tercero no la tenga” y agregó que la decisión del PSOE de rechazar en el Senado el proyecto que había sido aprobado en el Congreso ha sido “una traición” hacia los hijos y nietos de los españoles emigrados.