Un total de 397 votantes ejercieron el sufragio para las elecciones gallegas y vascas del 25-S

392 gallegos y 5 vascos residentes en Venezuela votaron en las elecciones de este 25 de septiembre

Un total de 392 gallegos (1,02 por ciento) y 5 vascos (0,09 por ciento) lograron votar en las elecciones al Parlamento de Galicia y del País Vasco, que se realizaron en esas dos comunidades el domingo 25 de septiembre (25-S).

392 gallegos y 5 vascos residentes en Venezuela votaron en las elecciones de este 25 de septiembre
Un joven votando en el Consulado de Caracas.

Un total de 392 gallegos (1,02 por ciento) y 5 vascos (0,09 por ciento) lograron votar en las elecciones al Parlamento de Galicia y del País Vasco, que se realizaron en esas dos comunidades el domingo 25 de septiembre (25-S). Asimismo, en voto presencial en la sede de la Oficina Consular de carrera, lograron sufragar 367 gallegos, de los cuales 96 lo hicieron por la provincia de A Coruña, 51 por Lugo, 110 sufragaron por Ourense, y 110 por Pontevedra. Por correo lo hicieron 6 inscritos en el CERA por A Coruña, 8 por Lugo, 11 por Pontevedra y ninguno por Ourense.

De igual forma, 5 vascos se personaron en el Consulado General de España en Caracas, de los 4 que lo hicieron por Vizcaya, y solo 1 por Guipúzcoa (nadie votó por Álava). Ningún vasco residente en Venezuela logró votar por correo.

En Venezuela podían votar 38.261 gallegos inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) al 1 de agosto de 2016, de los cuales 12.334 son de A Coruña, 3.780 de Lugo, 11.718 de Ourense, y 10.429 de Pontevedra. Asimismo, 5.360 vascos residentes en el país podían votar en estos comicios (289 inscritos en Álava, 3.451 en Vizcaya y 1.620 de Guipúzcoa).

Un total de 1.145 residentes gallegos residentes en Venezuela habían solicitado el voto (345 de A Coruña; 118 de Lugo; 360 de Ourense; y 322 de Pontevedra). Por su parte, 38 vascos radicados en el país sudamericano habían solicitado su derecho al sufragio (2 por Álava, 23 por Vizcaya y solo 13 por Guipúzcoa).

El Consulado General de España en Caracas abrió sus puertas los días 21, 22 y 23 de septiembre de 8:00 a 15:00 horas; el sábado 25 de 9:00 a 14:00 horas; y el domingo de 8:00 a 10:00 horas, para atender a aquellos votantes que decidieron acercarse a la Oficina Consular de carrera.

El número total de inscritos en el CERA por Galicia a nivel mundial para estas elecciones asciende a 443.005, y el de vascos a 69.219.

Los gallegos y vascos del exterior podían votar en urna hasta el mismo día de las elecciones autonómicas, es decir el 25 de septiembre.

Además, hasta ese momento, los consulados y oficinas consulares permitirán la recepción de los votos por correo, según el acuerdo de la Junta Electoral Central (JEC), que responde a una petición hecha por el Partido Popular (PP) ante la Junta Electoral de Galicia.

Hasta el momento, los electores inscritos en el CERA podían remitir su voto por correo hasta el 20 de septiembre y depositarlo en urna entre el 21 y 23 de septiembre.

En el acuerdo de la JEC, que se toma tras conocerse el informe favorable de la Dirección General de Españoles en el Exterior y de Asuntos Consulares y Migratorios, se explica que la ampliación de los plazos para pedir el voto y el envío de papeletas “puede provocar el retraso en la recepción de esta documentación” y por eso considera adecuado ampliar el plazo para poder emitir el voto.

Esta ampliación de los plazos en el sufragio en urna y la admisión del voto por correo no suponían un riesgo para que los sobres electorales no llegaran a tiempo del recuento si se tiene en cuenta –asegura– que en Galicia el escrutinio general de los votos de los electores inscritos en el CERA (Censo de Españoles Residentes Ausentes) se hace a partir del octavo día posterior a la fecha de la votación y en el País Vasco se hace a partir del quinto día posterior a la cita electoral.

La JEC explica que los sobres depositados por los electores en urna y los recibidos hasta el 23 de septiembre deberán ser remitidos, junto con el acta expedida por el funcionario consular, “con la mayor brevedad posible a la oficina que para estos efectos se constituya en el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación” que procederá a su envío urgente a las correspondientes Juntas Electorales Provinciales. Este procedimiento volverá a repetirse con los sobres llegados por correo y depositados en urna entre el 23 de septiembre y el 25 de septiembre, cuando acabe el plazo de votación en el exterior, coincidiendo con el cierre de los colegios electores en Galicia y el País Vasco.

Desde la JEC se insiste en que se deben utilizar los medios más rápidos posibles para el envío de los votos de manera que la Sociedad Estatal de Correos y Telégrafos tenga a su disposición los sobres con los votos antes de las 13,00 horas del 27 de septiembre, de manera que pueda hacer la entrega a las correspondientes Juntas Electorales Provinciales antes del escrutinio.

Las papeletas se destruyen

Las papeletas introducidas en las urnas se destruyen en presencia de los concurrentes, los miembros de las mesas, interventores y el público que quiso asistir, excepto aquellas que no hubieran sido consideradas válidas o las que hubieran sido objeto de alguna reclamación. El resultado y todas las incidencias quedan reflejados en el acta que se levanta de la sesión, junto a la que se archivan esas papeletas no destruidas. Este material es recogido por Correos y entregado en las Juntas Electorales Provinciales, que comienzan la revisión ocho días después en Galicia, y cinco días en Euskadi al igual que ocurre en las mesas electorales, es un recuento público.

Durante el escrutinio, la Junta Electoral Provincial no puede anular ningún acta ni voto, debiéndose limitar a verificar sin discusión alguna el recuento y la suma de los votos admitidos por las Mesas, limitándose a subsanar los meros errores materiales o de hecho y los aritméticos. Lo que sí puede hacer la Junta Electoral escrutadora es declarar válidos los votos indebidamente anulados por las mesas electorales. Concluido el escrutinio, los representantes de las candidaturas pueden presentar reclamaciones ante esa misma Junta Electoral.