Cantabria y Francia exploran vías para incrementar sus vínculos económicos, sociales y culturales

Cantabria y Francia explorarán nuevas vías que permitan fortalecer e incrementar las numerosas vinculaciones que ambos territorios mantienen en ámbitos como la economía, la educación, la cultura y la sociedad. Ésta es la voluntad conjunta que han expresado el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, y el cónsul francés en Bilbao, Fabrice Delloye, en el transcurso del encuentro que han celebrado este miércoles, día 9, en la sede del Gobierno regional.

Revilla ha señalado que las relaciones con Francia son de gran interés para España por cuestiones de cercanía, de afinidades históricas y por la importancia de esas alianzas para el desarrollo socioeconómico de ambos países. También lo son para Cantabria, entre otras cosas por la cantidad de turistas franceses que nos visitan cada año y por la presencia de varias empresas francesas.

Por este motivo, ha indicado que esta reunión ha sido un primer encuentro de cortesía con el cónsul para afianzar la relación personal de la región con la representación diplomática de Francia en todo el Norte de España (el Consulado en Bilbao abarca a Cantabria, País Vasco, Asturias, Navarra, La Rioja, Asturias y Galicia) y el punto de partida para futuros contactos que permitan impulsar esas relaciones.

Por su parte, Fabrice Delloye ha expresado el deseo de Francia de potenciar los lazos entre los territorios que conforman el Arco Atlántico y se ha referido concretamente a la necesidad de vertebrar todo ese espacio con un tren de alta velocidad que facilite la movilidad de las personas y que dé solución a la “ruptura” que actualmente se produce en la frontera en los trayectos de mercancías.

En este sentido, ha asegurado que el país galo sigue muy de cerca el acuerdo de Cantabria con el País Vasco para reclamar al Estado una conexión ferroviaria de altas prestaciones entre Bilbao y Santander, y que ésta pueda extenderse al conjunto de la fachada cantábrica.

Igualmente, ha apostado por que la cooperación territorial y de desarrollo económico que mantienen la región francesa de Aquitania y el País Vasco, a la que pronto se sumará Navarra, se amplíe al resto de territorios del Norte de España y muy particularmente a Cantabria.

Por último, el cónsul de Francia en Bilbao se ha referido igualmente al amplio margen que hay de potenciar el intercambio cultural y educativo, el hermanamiento entre ciudades y regiones, y el desarrollo de los idiomas francés y castellano a un lado y al otro de los Pirineos.