El padre Aly Argenis dirigió una oración por Venezuela al bendecir las velas

Un nutrido grupo de feligreses celebró el día de la Virgen de Candelaria en el Hogar Canario Venezolano de Caracas

Un nutrido grupo de feligreses celebró con fervor el Día de la Candelaria en el Hogar Canario Venezolano de Caracas (HCV), el domingo 3 de febrero, en el contexto de la fiesta de la Presentación del Niño en el Templo.

Un nutrido grupo de feligreses celebró el día de la Virgen de Candelaria en el Hogar Canario Venezolano de Caracas
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Un instante de la bendición de las candelas.

Un nutrido grupo de feligreses celebró con fervor el Día de la Candelaria en el Hogar Canario Venezolano de Caracas (HCV), el domingo 3 de febrero, en el contexto de la fiesta de la Presentación del Niño en el Templo.

Después de la suspensión de los actos programados para la festividad los días 1 y 2 de febrero, por motivo de la concentración nacional anunciada para el día 2, los organizadores decidieron convocar para el día 3 a una misa. La mañana del domingo, mediante llamados a través de las redes sociales, muchos pudieron acudir a rendir culto a su patrona.

El oficiante de la misa, el sacerdote Aly Argenis Villegas, señaló en su homilía que debemos levantarnos ante las adversidades y mantener la esperanza. Apuntó que la dinámica de esta fiesta es recordarnos que en medio de la oscuridad siempre habrá luz y que después de la tormenta viene la calma. “Esa es la esperanza, la confianza que como cristianos tenemos que tener. Hay que seguir, queridos hermanos, levantando la mirada como cristianos, mirando a Jesucristo, la luz del mundo”.

A continuación, el padre agregó que Candelaria es signo de luz. “María es un ejemplo de luz y en medio de nuestras oscuridades, ella también nos ilumina”.

“Este día lo celebramos, no solo por tradición, por cultura y por el amor canario y venezolano que le tenemos a la virgen de Candelaria, sino porque somos hombres y mujeres de fe”, concluyó.

Antes de la despedida, el padre Villegas dirigió una oración por Venezuela al momento de bendecir las candelas.

La espontaneidad de los fieles contribuyó a que hubiera momentos destacados por su emotividad en la celebración del domingo en honor a la Candelaria.

Antes del inicio del oficio religioso, Mary González de Rodríguez interpretó la canción ‘Virgen de Candelaria’ con el acompañamiento de los feligreses; seguida de un poema dedicado a la imagen declamado por Josefa Casanova. En la comunión se oyó una versión del ‘Ave María’ de Franz Schubert, con la inconfundible voz de Chago Melián. Con la canción ‘Venezuela de Herreros y Armenteros’, coreada por varias amigas, concluyó una jornada de hermosa tradición dedicada a la Candelaria.

Entre los feligreses que asistieron al oficio religioso, se encontraban directivos del HCV, miembros de la Comisión Virgen de Candelaria y del Comité de Damas de la institución, integrantes del Consejo de Residentes Españoles (CRE), expresidentes del HCV, así como directivos de asociaciones canarias residenciadas en Caracas.

Virgen de Candelaria

Virgen de la Candelaria o Nuestra Señora de Candelaria es una advocación mariana de la religión católica que tiene su origen en Tenerife, Canarias (España). Su etimología deriva de candelero o candela que se refiere a la luz: la luz santa que guía hacia el buen camino y la redención y aviva la fe en Dios. Su festividad es celebrada según el calendario litúrgico el 2 de febrero, donde se recuerda la presentación de Jesús en el Templo de Jerusalén después de su nacimiento y la purificación de María.

La Virgen de la Candelaria es, en su lugar de origen, la patrona de las Islas Canarias y se la clasifica como una Virgen negra. Su devoción tiene mucho arraigo en otras partes de España, y en países como Bolivia, Colombia, Cuba, México, Perú, Venezuela y otros. Asimismo, su patronazgo se extiende a varias ciudades y países de América y de otros continentes. También es la patrona del estado venezolano de Anzoátegui y de la localidad anzoatiguense de Cantaura.

La Virgen de la Candelaria toma su nombre de la fiesta de la Candelaria o de la Luz, que tuvo su origen en el Oriente con el nombre del ‘Encuentro’, y después se extendió al Occidente en el siglo VI, y llegó a celebrarse en Roma con un carácter penitencial. En Jerusalén se celebraba con una procesión con velas encendidas hasta la Basílica de la Resurrección (Santo Sepulcro), la cual había sido mandada construir por órdenes del Emperador Constantino.

Simeón recibe a Jesús cuando éste es presentado por sus padres en el Templo de Jerusalén. La iconografía de la Virgen de la Candelaria se basa en este pasaje bíblico de la Presentación del niño Jesús en el Templo.

Su fiesta se celebra, según el calendario o santoral católico, el 2 de febrero, después de que el papa Gelasio I prohibió y condenó, en el año 494, las fiestas lupercales, considerada una celebración pagana, y la sustituyó por la fiesta de la presentación, en recuerdo del pasaje bíblico de la Presentación del Niño Jesús en el Templo de Jerusalén (Lc 2;22-39) y la purificación de la Virgen María después del parto, para cumplir la prescripción de la Ley del Antiguo Testamento (Lev 12;1-8).

La Fiesta de la Candelaria se conoce y se celebra con diversos nombres: la Presentación del Señor, la Purificación de María, la fiesta de la Luz y la fiesta de las Candelas; todos estos nombres expresan el significado de la fiesta. Cristo la Luz del mundo presentada por su Madre en el Templo viene a iluminar a todos como la vela o las candelas, de donde se deriva la advocación de la Virgen de la ‘Candelaria’.