Los abuelos del laureado cineasta argentino nacieron en Taramundi y Ribadavia

Juan José Campanella: “A pesar de portar un apellido italiano, me crie en el seno de una familia de Asturias y Galicia”

Donde termina la Asturias occidental y se funde con Galicia, en un mismo paisaje y en un mismo idioma está la aldea de A Veiga da Sarza, en Taramundi (Asturias). En este lugar, casi de leyenda, nació el abuelo del laureado cineasta argentino Juan José Campanella. Está considerado uno de los más destacados realizadores cinematográficos, ganador de un Oscar por ‘El secreto de tus ojos’. Su abuela nació en la localidad orensana de Ribadavia.

Juan José Campanella: “A pesar de portar un apellido italiano, me crie en el seno de una familia de Asturias y Galicia”
Juan Jose Campanella
Juan José Campanella.

Donde termina la Asturias occidental y se funde con Galicia, en un mismo paisaje y en un mismo idioma está la aldea de A Veiga da Sarza, en Taramundi (Asturias). En este lugar, casi de leyenda, nació el abuelo del laureado cineasta argentino Juan José Campanella. Está considerado uno de los más destacados realizadores cinematográficos, ganador de un Oscar por ‘El secreto de tus ojos’. Su abuela nació en la localidad orensana de Ribadavia.

Pregunta. Por su apellido italiano sorprende que tuviera descendencia española.

Respuesta. Son estas cosas especiales que se producen en la Argentina. Escuché una vez a un amigo que me decía: detrás de un apellido italiano se esconde un apellido gallego. Y este es mi caso y el de millones de argentinos. A pesar de portar un apellido italiano, yo me crie en el seno de una familia de Asturias y Galicia.

Mi abuelo Julio Quintana Novo, de Taramundi, a tan solo metros de la frontera con Galicia, y mi abuela Felisa Rodríguez Borrajo nació en Ribadavia, en la provincia de Ourense. Los dos se conocieron en la Argentina y aquí se casaron.

P. ¿Conoció Taramundi, el pueblo de su abuelo?

R. Mi padre le había prometido a mi madre que harían juntos un viaje a la tierra de sus ancestros conmigo, que tenía ocho años. El viaje se concretó en 1967. En la aldea de Mousende sólo le quedaba como familiar Sara Corveiras, propietaria de la panadería del pueblo y con quien mantenía una correspondencia fluida. Sara era ‘Sariña’ para Luisa Quintana, la madre de Juan José Campanella. Más tarde, mi madre enfermaría de Alzheimer, aunque antes le pidió a Sara que cuidara de estas montañas que tanto le gustaban.

P. ¿Cómo empezó su vocación por el cine?

R. En febrero del 80, cuando vi ‘Qué bello es vivir’, de Frank Capra, yo tenía 20 años y estudiaba ingeniería electrónica. Me pasé cuatro años en la facultad, pero eso no quiere decir que llegué a cursar materias de cuarto año, que es cuando comienza la especialidad. Yo iba a ser ingeniero electrónico, pero el cine fue más fuerte. Amo el cine clásico, muy especialmente el norteamericano de las décadas de los 30 y 40.

Luego empecé a trabajar de montajista, para más tarde pasar a dirigir cine. Después de una larga temporada en los Estados Unidos regresé a la Argentina, donde inicié mi carrera.

P. ¿Cuáles han sido sus películas más destacadas?

R. Para mí todas son destacadas –sonríe–, ‘El mismo amor, la misma lluvia’ (1999), ‘El hijo de la novia’ (2001), ‘Luna de Avellaneda’ (2004) y ‘El secreto de sus ojos’ (2010, ganadora del Oscar a la mejor película extranjera). Luego me metí durante varios años en la película de animación ‘Metegol’ (2013).

P. Ha incursionado en el teatro con mucho éxito también.

R. Mi primera obra que adapté y dirigí fue ‘Parque Lezama’, en la cual conté con dos extraordinarios actores. Eduardo Blanco y Luis Brandoni. La misma estuvo varios años en cartelera. Inclusive, recorrimos muchos lugares de la Argentina. Siempre con el aforo completo.

P. ¿Pudo regresar a Taramundi?

R. Sí, en noviembre de 2005, hice un pequeño paréntesis en la grabación de ‘Vientos de agua’ y volví junto al actor Eduardo Blanco, gran amigo e hijo de gallegos, a visitar Taramundi y a Sara. La visita fue corta porque el rodaje continuaba en Mieres al amanecer del día siguiente. Ahora me falta conocer el pueblo de Ribadavia, donde nació mi abuela.

Después de más de un siglo, Julio Quintana regresa definitivamente a Taramundi a través de su nieto Juan José Campanella, quien ha sido nombrado por la corporación local como ‘Hijo Distinguido’ de este ayuntamiento. Ahora sí, Taramundi pasa a ser definitivamente un lugar de película.