Emigró con 17 años y se convirtió en dirigente de una empresa de fabricación de licores

Elpidio Llaneza, empresario asturiano en Chile, recibe el homenaje de ‘Langreanos en el Mundo’

Se vio obligado a emigrar a los 17 años, pero su alma siempre estuvo en Asturias. Elpidio Llaneza, empresario de 86 años natural de Cuturrasu, recibió el pasado viernes el galardón que anualmente entrega la entidad ‘Langreanos en el Mundo’.

Elpidio Llaneza, empresario asturiano en Chile, recibe el homenaje de ‘Langreanos en el Mundo’
Elpidio Llaneza.

Se vio obligado a emigrar a los 17 años, pero su alma siempre estuvo en Asturias. Elpidio Llaneza, empresario de 86 años natural de Cuturrasu, recibió el pasado viernes el galardón que anualmente entrega la entidad ‘Langreanos en el Mundo’. Elpidio encarna todos los valores que representa este premio, ya que se vio obligado a emigrar a la edad de 17 años, pero su alma siempre estuvo en Asturias. Así lo aseguró el pasado viernes, cuando desveló que primero emigró a Argentina, para encontrarse con la tuba de su padre, y, posteriormente, a Chile, país en el que logró asentarse. “Cuando marché no sabía lo que me esperaba y si volvería a ver mi pueblo y mi familia”, señaló el homenajeado, cuya trayectoria vital se asemeja a la de otros afamados empresarios asturianos que, como él, también tuvieron que lanzarse al incierto mundo de la emigración.
Elpidio empezó desde abajo, trabajando en una ferretería de Santiago de Chile, y acabó en lo más alto, con una empresa de fabricación de licores. No sólo eso, también representa a los empresarios de su país de acogida, un cargo con el que ha recorrido medio mundo.
Emprendedor por naturaleza, Elpidio Llaneza introdujo la sidra achampañada en Chile como uno de los productos más destacados dentro de su empresa. La llamó ‘El Gaitero’, un hecho que le valió un proceso judicial contra la firma afincada en Villaviciosa y de la que salió finalmente victorioso.
Su amor por la región le llevó a casarse con una asturiana. “La conocí en unas vacaciones y ya no me pude separar de ella”, afirmó. Y tuvo dos hijos. Uno de ellos, Manuel Llaneza decidió darle una sorpresa a sus padres y presentarse en el acto de homenaje, uno de los momentos más emotivos de la jornada.
También trabajó mucho por su pueblo, Cuturrasu, al que trataba de ayudar con diversas iniciativas cada vez que venía de visita. Por otro lado, y sobre la visión que el homenajeado tiene de las comarcas mineras, Elpidio Llaneza manifestó con cierta melancolía que “me gustaría que hubiera mejores condiciones económicas para que la gente pudiera vivir bien aquí”. El premiado señaló que Asturias “ha sido una región sacrificada toda la vida, como ocurre con la minería, y es una pena que no mejoremos”.
Llaneza no paró de recibir elogios la tarde del homenaje. El presidente de Langreanos en el Mundo, Florentino Martínez, destacó “los valores humanos” del homenajeado. Lo mismo que Yago Pico de Coaña, quien había presidido el jurado de estos premios. De Coaña aprovechó para hacer un breve recorrido por la vida del galardonado, destacando su afán solidario. Solidaridad a la que también aludió Guillermo Martínez, consejero de Presidencia del Principado, quien aseguró que “Elpidio nos ha ayudado en más de una ocasión cuando ha habido algún asunto que solventar en Chile”. Al acto también acudió la alcaldesa, María Fernández, y el empresario Rafael Velasco.