Alonso Ramos Torrejón, ‘Andaluz del Año’
“Mi padre me enseñó a no perder mis raíces”, así resumió Alonso Ramos su trayectoria de más de tres décadas en el asociacionismo andaluz en la Comunidad Valenciana, cuando el pasado viernes fue nombrado y homenajeado como ‘Andaluz del Año’ 2015.
“Mi mujer respeta mi cultura y la quiere tanto como yo a la suya”, decía este sevillano de Osuna, nacido el 16 de julio de 1953, quinto de siete hermanos de una modesta familia que tuvo que emigrar en 1960 en busca de una mejor vida. Alonso se integró perfectamente en la sociedad valenciana, incluso aprendiendo la lengua local. Con el paso de los años, en 1987 un sevillano, vecino de Moncada y amigo de la familia Alonso-Barrera, le propone la idea de seguir la estela de otras localidades valencianas y crear un centro andaluz en la localidad. Empezaría la gran historia andaluza en Moncada: la Asociación Andaluza Rociera de Moncada. Toda la familia queda integrada en actividades de la Casa. Durante años forma parte de la junta directiva de la Federación de Entidades Culturales Andaluzas en la Comunidad Valenciana: su hija Inma bailaría en el cuadro y su mujer Conchín y su hijo Alonso formarían parte del Coro.
Alonso empieza a vivir la andanza andaluza de Moncada como una gran familia, rodeado de gente que siente amor y devoción por las tierras andaluzas. Desempeña papeles de socio fundador, vocal del coro rociero durante 10 años, vocal de cultura y relaciones públicas, alternando sus cargos de vicepresidente y presidente de la Asociación. Su pasión por el Rocío, le lleva a encargarse y responsabilizarse del montaje de éste durante muchos años.
Ya en la Fecacv, participa activamente en la elección del primer presidente, Juan Garrido Mariñas; colaborador durante los cuatro años de la presencia de María García y vocal de los coros rocieros y voluntario para todas aquellas actividades de la Federación y fuera de ella en el Día de Andalucía, Feria de Abril en Valencia, Romería del Rocío, coronaciones, procesiones… Ya en el mandato de Purificación Torres sigue colaborando con los arreglos a la Virgen del Rocío, traslado de la Virgen y procesión de la Fonteta como fiel devoto ‘agarrao’ a los varales.
Sencillo, afable y trabajador incansable, busca un pretexto para participar, se emociona viendo a su familia vivir la tierra andaluza como nacidos en ella, cuando su hija forma parte de la corte de honor de la primera Reina de la Fecacv y, como no, el nombramiento de su esposa Conchín Marco como camarista de la Virgen.
